«Bastante hostil»: Aixa patea el tablero en Survivor y confiesa que hay que terminar con el sistema imperante ESPECTÁCULO El Intransigente

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«Bastante hostil»: Aixa patea el tablero en Survivor y confiesa que hay que terminar con el sistema imperante

Aixa aseguró en Survivor que está en contra de la vida de ciudad.

Aixa quedó como candidata a ganar el nuevo reality de Telefe.

Survivor continúa presentando a algunos de sus participantes, quienes lucharan por obtener la corona definitiva en el reality. En este sentido, Aixa salió de un circo para sumarse al programa y alzar la voz en señal de protesta. Puesto que, la artista circense aseguró que el ser humano está viviendo en un sistema que lo perjudica y el programa es su medio para decirlo.

A través de la última edición de Survivor, Aixa se manifestó contra el sistema capitalista. En este aspecto, expresó: «No me gusta este sistema, siento que el humano está para otra cosa, no para esta vida que yo considero bastante hostil(…)No me gusta hablar al pedo, soy corta y concisa. Lo que me puede hacer saltar la chispa es alguien que no comparta mis valores».

Posteriormente, la aspirante de Survivor habló de las cualidades que la podrían convertir en candidata a ganar. Además, manifestó: «Soy muy observadora, parece que miro a la nada, pero en realidad es porque estoy analizando todo. Creo que lo interesante va a ser ver a las personas en falta de sus comodidades. Puede sacar lo peor o puede llevarte a una linda experiencia o a un aprendizaje».

Se terminó la comida en Survivor y los participantes tuvieron que recurrir a una desesperada salida

Los participantes de Survivor arribaron a la isla con varios paquetes de provisiones. Sin embargo, rápidamente esos recursos se agotaron y esto obligó a los aspirantes a valerse de aquello que les brinda la naturaleza. En este sentido, las posibilidades terminaron siendo escasas. Consecuentemente, los sobrevivientes tuvieron que comer araña para subsistir en la isla.

En este aspecto, los participantes de Survivor se turnaron para probar este inusual manjar y uno por uno trató de encontrar algún parecido con otras comidas. Puntualmente, uno de ellos expresó: «Es como algo conocido. Como si hubiese sido un carbón, es medio carboncito. Tiene gusto como a chinchulín», fueron algunos de los comentarios de los sobrevivientes.

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