Sin mucha experiencia en el rubro de la conducción, Fernando Dente sorprendió al público al ponerse al frente de Noche al Dente en América TV. Además de enseñar su pasión por la comedia musical, el actor recibe cada noche en su talk show a grandes estrellas del mundo del espectáculo. En esta oportunidad, se encontró con un fuerte relato de parte de Andrea Ghidone.
«Estuve cinco años con Carmen, arranque como bailarina con destaque, media vedette hasta que llegué a ser primera vedette. El quinto año fue con Carmen y Moria, dije ‘¿qué más? Así que les dije muchísimas gracias por todo, culminó este ciclo para mí y comenzaba uno nuevo que era el tango», comenzó Andrea Ghidone sobre el inicio de su carrera.
«Tuviste el pico de tu carrera en una época donde había mucha presión con el cuerpo», señaló Fernando Dente, a lo que Andrea Ghidone respondió: «En mi caso era demasiado exigente y perfeccionista. Uno tiene un tiempo en la vida y le destina el tiempo a muchas cosas. Yo le destinaba mucho tiempo de mi vida al cuerpo, lo que era entrenar y lo estético. Me gustaba verme bien».
«Me gusta verme bien, pero ya no le dedico nada de ese tiempo. Eran otros momentos de mi vida y siento que era necesario para este ingreso. Claramente para trabajar en la revista si no tenías determinadas condiciones físicas era imposible entrar», continuó Andrea Ghidone. «Fuiste una de las primeras en denunciar a Aníbal Lotocki…», recordó Fernando Dente.
Sobre la denuncia a Lotocki, Andrea Ghidone expresó: «Ahí fue mi quiebre, yo ahí vivencie algo que nunca me había pasado. Me había hecho alguna intervención en Uruguay, donde las operaciones son estrictas. De ahí a pasar a un departamento dije ‘acá esto no está bien’. Quería ver que pasaba si alguien lo decía, pero lamentablemente no pasó nada».
«Hace menos de un año fue la partida de Silvina Luna, ¿qué te pasó a vos que alzaste la voz en su momento?», quiso saber el conductor. Movilizada, Andrea Ghidone respondió: «Yo estaba mucho con Gladys Florimonte que era muy amiga de ella y escuché todo lo que ella había pasado. Mas o menos lo que todos sabíamos. Me parecía que como la representante de un enorme grupo de personas, miles que no son visibles pero que sí sucede».
«A partir de ahí dije ‘ojalá para adelante Dios quiera que haya más controles con cirujanos donde sientan miedo de hacer lo que hace porque van a caer'», agregó. «¿Qué le dirías a esa niña?», le preguntó Dente, a lo que Andrea Ghidone replicó: «Que disfrute, que no sea tan mala con ella, que se sienta orgullosa de lo que está construyendo. Nunca me sentí orgullosa de eso, soy muy exigente. Este lugar te lleva a ser a veces un poco malo con uno, siempre pidiendo ser mejor».