El triunvirato de la Confederación General del Trabajo (CGT) se reunió durante la tarde para definir las próximas etapas de su relación con el Gobierno Nacional. Del debate surgió la decisión de no asistir a la mesa convocada por la Secretaría de Trabajo y donde también estarían los directivos de las empresas más grandes del país. El mayor sindicato de Argentina firmó que no negociarán con el Gobierno hasta no saldar las problemáticas que ya les habían planteado.
El Consejo Directivo de la CGT se reunió en la sede de la central sindical, en Azopardo 802. El encuentro fue encabezado por Pablo Moyano, de Camioneros; Héctor Daer, de Sanidad; y Carlos Acuña, de Estaciones de Servicio, y tuvo la presencia de dirigentes de otros sindicatos. Luego de la reunión, los sindicalistas realizaron una conferencia donde dieron a conocer los resultados del dialogo.
«Debatimos la última instancia de negociaciones que tuvimos con el Gobierno, las acciones que llevamos adelante. La síntesis de esta reunión es que el Gobierno no dio una respuesta positiva a dos cuestiones que consideramos fundamentales: la primera, la actualización del Impuesto a las Ganancias y la reintroducción de la cuarta categoría; el segundo planteo fue: que el Gobierno Nacional retire la apelación que hicieron en la Corte Suprema contra la suspensión del capitulo laboral del DNU», dijo Daer.
La CGT tildó la reforma laboral propuesta de «nociva» y «mal desarrollada». «No estamos dispuestos a sentarnos en una mesa de negociación y conversación tripartita cuando habíamos propuesto discutir la reforma laboral, y ayer el Gobierno reglamentó algo igual de nocivo: que una persona independiente puede tener hasta tres «colaboradores» también independientes y no tendría la necesidad de establecer una relación de dependencia», agregó el titular del sindicato de Trabajadores de Sanidad.
Los sindicalistas también definieron adherirse a la marcha del 7 de agosto en San Cayetano y llamara a un plenario con los secretarios generales y delegados regionales de la CGT. La medida de resistencia de no participar de la reunión del Consejo Federal del Trabajo fortaleció el lado más combativo del la organización.
El secretario de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, Julio Cordero, recibió a los empresarios del Grupo de los Seis y comenzaron a trazar el camino a una mesa tripartita entre el Gobierno Nacional, los empresarios y los trabajadores. Mas, la súbita baja de la CGT al encuentro podría poner en juego las negociaciones.