Desde su llegada a la televisión argentina, Socios del Espectáculo, el ciclo conducido por Rodrigo Lussich y Adrián Pallares para Canal Trece, ha sabido destacarse con programas llenos de información y diversión. También reciben a importantes figuras del espectáculo, que suelen sorprender a los televidentes con fuertes historias.
En esta oportunidad recibieron a Patricia Palmer, quien emocionó a todos al hablar del fallecimiento de Susana Campos. Todo ocurrió mientras repasaban la carrera de la invitada, quien recordó: «En esa época se hacía mucha televisión. Con Susana hice tres novelas. Eramos muy amigas, Susana murió, se fue de gira, de mi mano. Fue una gran amiga y una gran referente, la extraño bastante».
«Me puse a ver Brujas en Teatriz, la primera edición, la de Susana Campos, que actriz descomunal», contó Rodrigo Lussich, a lo que Patricia Palmer replicó: «Era muy enigmática y una mujer muy adelantada. Nos llevábamos veintipico de años, pero hicimos una amistad muy grande porque hicimos tres novelas, Libertad Condicionada, Dulce Ana y Los Ángeles no lloran».
«Era una gran villana. El primer capítulo de Dulce Ana lo ve (Alejandro) Romay y dice ‘está todo bien pero Susana Campos no va, tiene la bondad en los ojos’. Yo dije ‘si no va Susana, yo no voy’. Habíamos trabajado un montón, son discusiones de laburo. Después recibimos amenazas de muerte para Susana, ahí está la bondad», rememoró la actriz.
«¿Había competencia entre ustedes? ¿Una guerra de egos?», quiso saber Matías Vázquez, a lo que Patricia Palmer respondió: «No, jamás. Al contrario. Yo no sé lo que es eso, afortunadamente. Yo quiero trabajar siempre con gente que sea mejor, aprendo, me divierto, admiro. Sí padecí el ego de otro actor, eso existe. Pero he tenido hermosas compañeras».
«Son cuarenta años de trabajo, muchos años. Entrábamos todos los días a la casa de la gente, cuando era la época de las novelas. Sos como de la familia. Hubo un momento en el que no me sentía cómoda, me enojé, no entendía la falta de privacidad. No se me subieron los humos, me alejé. Sentía el fracaso del éxito», reflexionó Patricia Palmer.
Luego, Rodrigo Lussich contó: «Yo me acordaba de la novela Sin marido, donde te mataron. (Alberto) Migré tuvo que dar la cara en el último capítulo, dijo ‘señores he matado a la protagonista, ustedes sepan disculpar’. Año ’88, un éxito de la tarde de El Nueve». «Lo querían matar. Una novela adelantadísima porque era una violación dentro de un matrimonio. Incluso en el Norte la prohibieron, consideraban absurdo que una mujer no hiciera lo que tiene que hacer sexualmente con el marido», señaló Patricia Palmer.