Hace algunos años un fuerte quiebre dejó en vilo al mundo del espectáculo: después de varios cruces mediáticos, Georgina Barbarossa y Pepe Cibrián le pusieron punto final a su amistad. Con tanta agua debajo del puente, sus colegas esperan una reconciliación entre ambas partes, pero en conversación con Intrusos, el ciclo conducido por Flor de la V para América TV, el artista fue categórico.
«¿Se pudo recomponer la relación con Georgina?», preguntó Marcela Tauro durante la entrevista. Sincero como nunca antes, Pepe Cibrián expresó: «No, no. Yo no tengo buena memoria, pero hay cosas que… Yo le tengo un gran cariño por la historia que tuvimos, hoy no. Ella no es mala, al contrario. Tiene que llamarme y pedirme disculpas».
«Lo que pasó en su programa fue muy doloroso, me expuso de una manera que no merezco. Me enojo porque primero no era cierto y segundo porque no me lo merezco por el amor que nos tenemos», agregó un contundente Pepe Cibrián. «Si te llama Georgina y te pide disculpas, ¿las aceptas?», quiso saber Guido Záffora, íntimo amigo del artista, a lo que este respondió: «La invito a comer ese mismo día».
«Yo pensé que ella ya te había llamado», señaló entonces Josefina Pouso, a lo que Pepe Cibrián contestó: «A los dos días me llamaron de la producción, no ella, para decirme si quería ir al día siguiente al programa para pedirme disculpas públicamente. Eso no me sirve, a mí públicamente no. Si ella personalmente me llama… Hemos vivido perdidas, nacimientos, todo juntos».
«¿La extrañas?», insistió Pablo Layus. Movilizado, Pepe Cibrián contó: «No, lo que extraño es lo mucho que nos divertimos, lo que padecimos. Son cuarenta años juntos, le tengo un gran cariño y respeto profundo. Creo que ella no se portó bien, siendo la figura debería haberle dicho a la producción ‘esto no se pasa’. Eso es lo único que creo y que me hizo mucho daño. No profesionalmente porque la gente no le dio importancia, pero si me hizo daño a mí en lo personal».
«Georgina estuvo en todos los momentos de mi vida, trabajamos juntos y nos divertíamos como locos. Pero pasó al aire algo muy duro para mí que no me merecía y que no trascendió más que con los juicios que le he hecho, que los gané todos. Me sentí muy expuesto, porque que lo diga otro me da igual, pero Georgina sí. Yo la amo profundamente», continuó Pepe Cibrián. «Me dicen que estaría enojada ella con vos», señaló Marcela Tauro, a lo que el actor contestó: «Pero es un problema de Georgina. Es ingenuo, ¿por qué estaría enojada ella si la cagó ella?»
«El problema no fue lo de mi ex pareja, sino algo de alguien que me acusó de algo aberrante y lo pusieron al aire. Fue muy duro para mí y de hecho no tuvo trascendencia porque era absurdo y delirante. Gané los juicios que he encarado, muy serios. No me permito esa falsedad, ahí es donde me sentí terriblemente dolido. A veces uno perdona pero es muy difícil olvidar. Si está enojada cuanto lamento, es toda una vida. Me gustaría irme de la vida estando cerca de ella, pero si no no pasa nada», cerró Pepe Cibrián en referencia a la acusación por abuso sexual que recibió años atrás.