La cosecha de soja en la Argentina ha llegado a su fin y el Gobierno de Javier Milei espera recibir divisas por un valor aproximado de USD20.000 millones. Durante esta campaña, se sembraron 17,3 millones de hectáreas de soja, produciendo un total de 50,5 millones de toneladas. Este resultado representa un aumento del 7% en comparación con la campaña anterior 2022/23.
Así lo detalló el reciente informe publicado por la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, que desglosa los resultados de la campaña y su impacto en la economía nacional. El rendimiento promedio a nivel nacional fue de 2.990 kilos por hectárea, duplicando prácticamente el rendimiento de la campaña anterior, que se vio severamente afectada por la sequía. Este rendimiento también significa un aumento del 24% en comparación con el promedio de las últimas cinco campañas.
La región del núcleo norte, que incluye el sur de Santa Fe, sureste de Córdoba y suroeste de Entre Ríos, destacó con el mayor rendimiento promedio, alcanzando 3.850 kilos por hectárea. Este rendimiento excepcional en una de las áreas agrícolas más importantes del país ha sido importante para los resultados positivos de la cosecha.
El informe de la Bolsa de Cereales también destaca que la recuperación en los niveles de producción impulsará significativamente la contribución de la cadena de soja a la economía argentina. Se espera que el producto bruto sojero alcance los US$ 17.223 millones, lo que representa un aumento del 104% en comparación con el ciclo anterior.
Los dólares que captaría el Banco Central gracias a las exportaciones de la soja
Las exportaciones generadas por esta cosecha podrían llegar a los US$ 19.868 millones, un 35% más que en 2022. Sin embargo, estas cifras aún están por debajo de los picos alcanzados en las campañas de 2022 y 2021, que fueron de US$ 23.900 millones y US$ 23.100 millones, respectivamente.
En términos de recaudación fiscal, la cosecha de soja también tendrá un impacto significativo. Se estima que el aporte será de US$ 8.052 millones, lo que supone un incremento del 66% en comparación con la campaña anterior. Este aumento en la recaudación fiscal es vital para el financiamiento de diversos programas y proyectos nacionales, subrayando la importancia del sector agrícola en la economía argentina.
En definitiva, la reciente cosecha de soja no solo ha superado las expectativas en términos de producción y rendimiento, sino que también promete un impulso económico significativo para el país. Con un aporte considerable en divisas, exportaciones y recaudación fiscal, la campaña de soja reafirma su rol central en la economía argentina.