El rumor de una posible denuncia contra el expresidente Alberto Fernández por violencia de género por parte de Fabiola Yáñez se terminó de confirmar el día de hoy. A raíz del escándalo nacional, debido a que no hay precedentes de una denuncia por ese delito, el Gobierno nacional reaccionó rápidamente en sus redes sociales y se hizo eco de esta grave situación.
El vocero presidencial Manuel Adorni recordó la existencia de la Línea 144 para denunciar casos de violencia de género. A pesar de que hace un mes hubo una reestructuración profunda de la línea telefónica por el vaciamiento del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, la administración libertaria destacó, aún así, que sirve para asistir a todos los argentinos que atraviesen una situación de violencia y riesgo.
«La línea 144 está abierta las 24 horas para asistir a todas aquellas personas que sufren violencia por motivos de género», expresó el portavoz de Javier Milei en su cuenta personal de X/Twitter a pocos minutos de conocerse la grave denuncia de Fabiola Yáñez.
El Ministerio de la Mujer no hizo nada
Según TN, la ex primera dama ya había pedido ayuda a los canales posibles, entre ellos, el entonces Ministerio de la Mujer. Sin embargo, la única respuesta que le dieron fue «ya va a pasar, no se puede hacer nada». De esta manera, no sólo no se activó un protocolo, sino que se revictimizó a la denunciante, quien, según el mismo medio, tiene archivos incriminatorios contra el expresidente.
Según periodistas que pudieron acceder a las conversaciones entre Alberto Fernández y Fabiola Yáñez, era al menos la tercera vez que aquel la golpeaba, aunque no hay precisión sobre las fechas de estos hechos. Acorde la información que se obtuvo, el exmandatario se excusó por estar pasando «un mal momento».
«Por miedo, Fabiola Yañez habría ido a pedirle ayuda a Elizabeth Gómez Alcorta por los episodios de violencia de parte de Alberto Fernández. Tremendo todo», confirmó el periodista Julián Alvez en su cuenta de X.
En junio, el Gobierno nacional cerró definitivamente el Ministerio de la Mujer, ya que «fue creado y utilizado por la administración anterior con fines políticos-partidarios para propagar e imponer una agenda ideológica». Además, se cerró para reducir el gasto público y el tamaño del Estado.
«Ninguna de sus acciones concluyó en la baja del índice del delito», mencionaron desde el Ministerio de Justicia hace dos meses. «Por el contrario, el pueblo argentino fue testigo de su sesgo ideológico en la defensa discriminatoria de las víctimas». Además, se detectó un «sobremantenimiento de edificios, estructuras y más de 800 empleados con distintos sueldos».
