A principios de la década del setenta, en New York, un grupo de jóvenes entusiastas buscaba, de manera desesperada, alcanzar el éxito económico revolucionando, a su vez, la historia de la música y el Rock and Roll. Uno de los directores creativos del proyecto, Stanley Eisen, adoptaría para ello una nueva personalidad: una estrella negra pintada sobre su ojo izquierdo, un nuevo nombre, un alter ego que pasaría a la historia.
Paul Stanley pasó de un inseguro chico judío de los barrios marginados neoyorkinos, a estrella consagrada de la música al fundar, en 1973, la Kiss. Por muchas décadas, el éxito con la música lo situó en la cima del mundo. Sin embargo, las vicisitudes y fluctuaciones del mercado de la música, sumadas a su fuerte vocación empresarial, condujeron al cantante a perseguir otros rumbos. Solo hacía falta conseguir encauzar la poderosa corriente artística de Paul con otra de sus aficiones: el vino.
Kiss fue, desde muy temprano, una banda que entendió que el negocio de la música no estaba necesariamente ligado a la venta de disco o las giras. En efecto, hacia 1977 expandieron de manera considerable un mercado paralelo que consistía en el merchandising. Cualquier producto, desde chicles hasta comics, que tuviera el sello de la banda suponía un éxito absoluto; pero ¿Cómo esto se tradujo en el mercado vitivinícola?
El gran negocio rioplatense
En lo que supuso el regreso de Kiss a tierras argentinas (2009, 2012, 2015), Paul Stanley entró en contacto con el conocido empresario Jorge «Corcho» Rodríguez. Rodríguez es, antes que nada, un entusiasta de la cultura que circunda al Rock & Roll y al motociclismo, por lo que no es de extrañar que dos personas con afinidades tan en sintonía, la música y los negocios, no hubieran de encontrarse tarde o temprano. Es así que Rodríguez propuso a Stanley ingresar en el mercado vitivinícola aprovechando su estancia «Yellow Rose», en Uruguay, donde ya contaba con algunas modestas parcelas dedicadas al cultivo de viñedos.
El desarrollo de este negocio vitivinícola terminó de concretarse en 2022. El cantante de Kiss anunció el lanzamiento a sus fanáticos en su página oficial con el siguiente mensaje: «¡Sin sorpresas por aquí! Estoy ofreciendo a todos los que conozco mi asombroso box intervenido artísticamente con tres botellas de Pinot Noir. Es un fantástico vino premium de mi acre en el viñedo Yellow Rose de Punta del Este, Uruguay. Mi buen amigo, Corcho Rodríguez, hizo todo esto realidad y a él le envío mis más humildes agradecimientos». Tanto el paquete, en su arte de tapa, como las etiquetas de las botellas están ilustrados con una obra pictórica del propio Stanley.
El Pinot Noir
Supone la variedad más antigua e importante de la familia Pinot. Asimismo esta uva es la responsable de la existencia del vino tinto de Borgoña. A diferencia del Cabernet Sauvignon, que excepto por los climas muy fríos, es una variedad más bien dúctil, el Pinot Noir demanda mucho tanto de los cultivadores como de los productores. Debido a la emoción generada a nivel mundial por degustar uno de los mejores tintos de Borgoña, muchos de los productores más ambiciosos del mundo se inclinaron por cultivar esta variante tan caprichosa e impredecible. Así, Pinot Noir supone una variedad trasplantada a casi todo el mundo, excepto por aquellas zonas muy cálidas.
Si bien es difícil determinar cualidades comunes para una vid tan extendida, siendo que los factores climáticos y geográficos inciden en gran medida en el resultado final, sí podemos decir que los Pinot Noir comparten un cierto registro frutal dulce y, en general, menores niveles de taninos y pigmentos que los otros grandes tintos franceses, el Cabernet Sauvignon y el Syrah.
El vínculo entre Kiss y Argentina está ampliamente documentado en registros escritos y audiovisuales. Los fanáticos verdaderamente son leales y atesoran cualquier momento que involucre la banda de sus amores y la tierra patria. En este caso, tenemos una muestra de dos pasiones argentinas amalgamadas en un solo paquete: el vino y el Rock & Roll. Imperdible para cualquier fan que pueda acceder al Stanley Family Reserve.
