Hace casi un mes Macarena Rinaldi y Fede Hoppe sorprendieron al mundo del espectáculo con una emocionante noticia: después de siete años de amor, anunciaron que esperan su primera hija. “Nuestra hija viene en camino, fue hermoso enterarnos de su llegada… Amanda, te esperamos para acompañarte a crecer, cuidarte y amarte infinitamente ¡Bienvenida, hija!”, escribieron en las redes sociales.
Sin embargo, no todo parece haber sido de rosas para la pareja y su dulce espera, y es que Macarena Rinaldi debió atravesar un largo camino hasta quedar embarazada. Desde sus redes sociales, la bailarina reveló: «La búsqueda de mi beba fue distinta a lo que imaginaba, creía que para traer un hijo al mundo bastaba la voluntad y tomar la decisión. Pero muchas veces eso no alcanza y la vida hace lo suyo, jugando cartas que no vemos venir”.
«El camino para acercarme a mi deseo fue más largo de lo que suponía, con dificultades que aprendí a aceptar y abrazar. Solo yo sé cuánto tuve que trabajar(me) para recibir a mi hija y a esta nueva Maca-Mamá. Fue un tiempo de atravesar muchas cosas, entre ellas un tratamiento que no funcionó, algo que me llenó de frustración», siguió.
«Como paciente siento que no podría haber hecho más, lo encaré con una garra, una ilusión, un entusiasmo, me preparé tanto… Y fue un cachetazo tan doloroso, no solo por el resultado sino por las formas de algún que otro profesional. Como futura psicóloga hay cuestiones que aún no puedo creer que ocurran dentro de un proceso tan sensible”, expresó Maca Rinaldi.
“Más allá de todo, siempre tuve claro que quería disfrutar de la búsqueda, de ir hacia el encuentro con mi bebé, de la forma que me tocara, y me llevara el tiempo que me llevara. Este deseo tan potente se merecía que vaya tras él con alegría, entereza y fortaleza. Me ocupé de buscar información que me calme, de juntarme con personas que hayan vivido situaciones parecidas, las quería escuchar, que me ayuden a abrir la cabeza y validar todos los caminos”, contó.
“Me apasioné investigando sobre la reproducción asistida, tanto que lo elegí como tema de mi tesis para finalizar la carrera de Psicología (y en eso estoy). Lo compartí, lo hablé con gente de mi círculo cercano. Y sentir ese apoyo cambió la vivencia del gris a colores vivos. También ayudaron las horas de terapia, como soporte fundamental de mis momentos difíciles (y de los lindos también)”, señaló la bailarina.
Finalmente, Macarena Rinaldi cerró: “Y mientras empezaba a ver ‘preciosa’ mi búsqueda, aún llena de incertidumbre, mientras empezaba a amarla porque era la única que tenía y me estaba enseñando cosas que no sabía… Llegó Amanda. Naturalmente, cuando menos lo imaginaba, ella se quedó y se anidó en mi. Ojalá que esté disfrutando mucho de su nidito, porque lo venía cuidando y preparando para cuando ella quisiera venir. Y espero darle la paz que ella me da a mí”.