El dirigente social Juan Grabois, líder del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE), fue víctima de un escrache este domingo en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, tras regresar de su visita al Papa Francisco en el Vaticano. En medio de gritos de “chorro” y “ladrón”, un grupo de pasajeros lo increpó mientras esperaba para salir de la terminal, lo que generó una tensa confrontación que debió ser controlada por efectivos de la Policía.
En un video que circula en redes sociales, se puede ver a Grabois, visiblemente enojado, respondiendo a las acusaciones de los pasajeros. “¿A quién le robé?”, vociferó el dirigente social, mientras los celulares lo filmaban. “A nosotros, los argentinos”, le respondió uno de los presentes, intensificando el intercambio hasta que la policía intervino para escoltarlo fuera del lugar.
Desde su cuenta en la red social X (antes Twitter), Grabois no tardó en reaccionar al incidente. “Sigan intentando. Nunca me van a correr de ningún aeropuerto. Nunca me van a callar. Nosotros no nos rendimos nunca”, escribió, subrayando su determinación frente a los ataques recibidos.
Sigan intentando. Nunca me van a correr de ningún aeropuerto. Nunca me van a callar. Nosotros no nos rendimos nunca.
— Juan Grabois (@JuanGrabois) September 23, 2024
El escrache parece estar motivado por recurrentes acusaciones, sin sustento judicial, de malversación de fondos estatales a través de planes sociales, una narrativa que persigue a Grabois y a otras organizaciones cercanas a su figura. Hasta el momento, no hay causas judiciales en curso que involucren al referente social en delitos de este tipo.
El episodio en Ezeiza ocurre poco después de que Grabois regresara de Roma, donde participó en la conmemoración de los 10 años del primer Encuentro Mundial de Movimientos Populares. Durante su estadía, Grabois asistió como miembro del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral y fue testigo de las duras críticas del Papa Francisco hacia el gobierno de Javier Milei en materia de justicia social.
“El Gobierno se puso firme y en vez de pagar la justicia social, pagó el gas pimienta, le convenía”, manifestó el Papa en relación a las recientes protestas reprimidas por la Policía en Argentina. Estas declaraciones, realizadas ante representantes de movimientos sociales de América Latina, África, Asia y Europa, fueron vistas como un respaldo a líderes como Grabois, defensores de la economía popular y la justicia social, principios que el Sumo Pontífice reiteró en su discurso.
Francisco instó a los presentes a seguir combatiendo la “economía criminal” y a ser los “custodios de la justicia social”. “Ustedes tienen que estar ahí para recordarles a los políticos al servicio de quién están, insistiendo, insistiendo, para que hagan justicia”, expresó el Papa en uno de sus pasajes más enfáticos, donde también pidió que no se arrodillen ante “la estatua de oro” por miedo a las consecuencias.