La Justicia Federal está inmersa en un caso que ha generado numerosas especulaciones tras el ataque contra el presidente de la Sociedad Rural (SRA), Nicolás Pino. Aunque el principal sospechoso, Alberto Santiago Soria, de 40 años, permanece detenido, el juez federal Daniel Rafecas ha expresado ciertas dudas sobre su vinculación directa con el atentado. A pesar de esto, Soria seguirá en prisión mientras continúa la investigación bajo un estricto secreto de sumario.
Soria, un agente inmobiliario de la Ciudad de Buenos Aires, fue arrestado el viernes por la noche en su domicilio tras un allanamiento. Sin embargo, según fuentes judiciales citadas por la agencia NA, el magistrado ha señalado que «la identidad del sospechoso y la autoridad intelectual no encajarían con el perfil» esperado para el autor del ataque. Este aspecto ha generado incertidumbre en la investigación, pero las autoridades prefieren mantener la cautela y seguir adelante con las indagaciones.
El incidente ocurrió cuando una carta explosiva fue enviada a la sede de la Sociedad Rural, resultando en una detonación que liberó una especie de humo o polvo blanco, lesionando a Pamela Sousa, secretaria de Pino. Desde entonces, diversas hipótesis han surgido en torno a la autoría del ataque. Aunque inicialmente se sospechó de grupos veganos o anarquistas, estas teorías fueron rápidamente desestimadas por los directivos de la SRA, incluyendo a su vicepresidente, Marcos Pereda. «Yo descartaría que sean ellos porque en definitiva son activistas que necesitan pancartas, figurar, traspasar mensajes y esto no tiene nada que ver con eso», afirmó Pereda.
Otra teoría que ha cobrado fuerza en las últimas horas sugiere que el ataque podría estar relacionado con las tensiones políticas entre el Gobierno y ciertos dirigentes rurales, especialmente después del rechazo del Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) sobre los fondos de la SIDE. Aunque esta hipótesis es tomada en consideración, Pereda ha insistido en que «es medio temprano para estar especulando» y que se debe esperar a tener más datos fácticos de las autoridades.
La detención de Soria se produjo gracias a un análisis exhaustivo de las cámaras de seguridad y un rastreo meticuloso de su trayecto utilizando dos líneas de colectivos. Además, un análisis comparativo científico permitió cotejar su rostro y postura corporal con los registros de las cámaras, lo que llevó a su identificación y posterior arresto. Sin embargo, este punto clave en la investigación ahora se encuentra bajo escrutinio debido a las dudas planteadas por el juez Rafecas.
Los antecedentes del detenido por el atentado contra el presidente de la Sociedad Rural Argentina
Cabe destacar que Soria ya cuenta con antecedentes penales por «amenazas antisemitas anónimas» en 2017, una causa que aún está en la Fiscalía Penal número 5 de la Ciudad, a cargo de Miguel Kessler. A pesar de estas dudas, el proceso judicial seguirá su curso y se espera que nuevas pericias y análisis aporten mayor claridad sobre su implicación en este caso de alto perfil.
Así fue el momento en el que explotó el paquete dirigido al presidente de la Sociedad Ruralhttps://t.co/YjllXII35W pic.twitter.com/d6MQPkn0yE
— TN – Todo Noticias (@todonoticias) September 6, 2024
