El dirigente social Juan Grabois felicitó -con cierta ironía- al presidente Javier Milei por su “apertura al diálogo” con los movimientos sociales, luego que trascendiera que su padre, Norberto ‘Beto’ Milei, firmó un acuerdo con organizaciones, nucleadas en el Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase)-Vía Campesina, para la cesión de miles de hectáreas de tierras en la provincia de Santiago del Estero.
“Felicito a Milei por su apertura al diálogo con los movimientos sociales, particularmente con el Mocase-Vía Campesina, lo que permitió llegar a un acuerdo justo y pacífico entre ricos y pobres en Santiago del Estero. Espero que Milei siga ese buen ejemplo de tolerancia y comprensión en todo el país. Todo sería mejor”, escribió este viernes Grabois en su cuenta de la red social X.
En respuesta a su propia publicación, Grabois agregó: “Para quienes no entendieron la ironía: Milei PADRE y el MOCASE acordaron una división fifty fifty de un campo en conflicto”. Con lo cual, sintetizó el fundador del Movimiento de Trabajadores Excluidos, de la Unión de Trabajadores de la Economía Popular y del Frente Patria Grande, “Milei HIJO ‘debería seguir ese ejemplo’ para que vuelva el famoso fifty fifty, capisce?”, sentenció.
El convenio de Milei padre con el Mocase
El padre de Milei firmó la semana pasada un acuerdo con Mocase en la localidad santiagueña de Añatuya por el que se comprometió a ceder 2.800 hectáreas de tierras rurales de su empresa agropecuaria a una comunidad de agricultores familiares indígenas. Este convenio transaccional logró resolver un viejo litigio por la propiedad de un campo con la empresa agropecuaria La Ponderosa SA, que pertenece a Norberto Milei, y que históricamente ocupaba la comunidad de campesinos indígenas vinculados al Mocase.
El predio ocupa 5.800 hectáreas en el paraje Pampa Atún, ubicado en el departamento Mitre, de los cuales 2.800 hectáreas fueron cedidas, mientras que el resto permanece en manos del padre del mandatario nacional. Las tierras, en las que se cultivan algodón, trigo y maíz, eran reclamadas como propias desde fines de 1995 por la Comunidad Indígena Sentimiento de Mi Tierra del Pueblo Originario Sanavirón, enrolado en el Mocase-Vía Campesina.
Esta comunidad de productores indígenas fue reconocida por el Estado a través de Relevamiento Territorial de Comunidades Indígenas, que le otorgó personería jurídica propia y una carpeta técnica en las cuales se detalla información sobre la presencia de antepasados de estas familias en esas tierras, incluso desde antes de la conformación del Estado argentino.
Desde el Mocase presentaron cartografías junto con otra documentación para defender sus derechos posesorios sobre el predio. Asimismo, recordaron que durante casi tres décadas, las familias recibieron reiteradas denuncias, notificaciones judiciales y sentencias de desalojo que fueron resistidas hasta la actualidad, consignó NA.