La exdiputada Elisa Carrió volvió a cargar con dureza contra el Gobierno de Javier Milei, lanzando críticas al ministro de Economía, Luis Caputo, a quien acusó de «armar una bicicleta financiera» para favorecer a sus allegados. Por otro lado, Carrió ninguneó a Manuel Adorni por ser comunicador social cuando en los papeles es licenciado en Economía.
Carrió también arremetió contra Manuel Adorni, vocero de la presidencia, cuestionando su rol de comunicador: «Que Adorni explique en su rol de comunicador social de buenas noticias para que todos los argentinos entren en el juego de unos pocos. Así todos somos felices y comemos perdices», ironizó la líder de la Coalición Cívica (CC). Este mensaje se suma a sus frecuentes críticas hacia el oficialismo, desde donde acusa a Milei y su equipo de implementar políticas que, en su visión, favorecen solo a una elite.
Durante la semana pasada, Carrió ya había advertido sobre la estrategia de polarización que adoptó Milei frente a la vicepresidenta Cristina Kirchner. En diálogo con Radio Con Vos, la dirigente señaló que esa táctica podría volverse en contra del mandatario. «Me da la impresión de que este chico está jugando con fuego, porque si Cristina le gana la provincia de Buenos Aires, cae el Gobierno», advirtió, resaltando el riesgo de elegir un enemigo político tan potente.
La exdiputada también se refirió al impacto que una estrategia de confrontación podría tener sobre el propio Milei, recordando la experiencia de Mauricio Macri en 2019. «Al polarizar de esta manera, lo que está logrando es lo que hizo Cristina: ‘Armen un partido y ganen las elecciones'», reflexionó Carrió, advirtiendo que la política de confrontación podría consolidar a la oposición y perjudicar al Gobierno en un futuro.
El cuestionamiento de Carrió al ajuste del Gobierno de Javier Milei sobre el Hospital Garrahan
«¿Cómo van a destruir el Garrahan, que es una capital social donde, mirado desde el interior, es la salvación de los niños?», se quejó la dirigente radical, mencionando que ya inició trámites para presentar una denuncia con testigos que respaldan sus afirmaciones. Además, destacó el rol del hospital en la sociedad, especialmente para familias del interior del país.
«Se les pidió la renuncia por haber dado un bono de $500.000 con fondos propios de las obras sociales», aseguró la exdiputada nacional y sostuvo que los médicos y enfermeras del hospital cumplen funciones esenciales y deberían contar con ingresos dignos. «A vos te parece que alguien que está al lado del dolor, que está dando los medicamentos, no tiene derecho a tener un ingreso mínimo que lo ayude a llevar semejante responsabilidad con profesionalismo?», insistió.
“Sin clase media no hay movilidad social ascendente, solo queda un país de ricos o pobres que es a donde nos quieren llevar”, concluyó, reforzando su postura crítica hacia la administración de Milei y sus funcionarios.
