En el marco de una semana marcada por el conflicto con las universidades, desde el Gobierno Nacional adelantaron que se propondrá un proyecto para cobrarle la educación universitaria pública a los alumnos extranjeros. El proyecto se conoció un día después de la multitudinaria marcha universitaria en reclamo de nuevos fondos para las universidades, así como el veto la Ley de Financiamiento Universitario. El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, comentó acerca del proyecto.
«Me parece una medida razonable. Quien viene de otro lugar a Argentina es alguien que no ha pagado no un solo impuesto local en toda su vida. Nosotros creemos que la educación, la salud y la seguridad tienen que cobrársele a quienes utilicen estos servicios y no hayan aportado nunca», afirmó Martín Menen. «Por algo vienen acá, en sus países no deben ser tan accesibles, es razonable que paguen», agregó.
El origen de la propuesta puede rastrearse a la Ley Bases, que en uno de sus borradores incluyó cobrarle a los estudiantes extranjeros. El fragmento finalmente fue eliminado antes de su aprobación final, pero ahora se busca tratarlo de forma independiente en el Congreso. Desde el Gobierno señalaron que el principio de gratuidad está garantizada para aquellos alumnos con residencia permanente en Argentina.
Lo que el Gobierno planteó es una reforma al sistema educativo, que entre sus propuestas incluiría: un examen al terminar el secundario para fortalecer la evaluación Aprender; liberar restricciones para la educación a distancia en los niveles primarios y secundarios; garantizar que los profesores hayan cumplido con un ciclo pedagógico; evaluaciones periódicas a docentes y formación continua de los mismos; cursos de nivelación o ingreso para las universidades, pero sin que estos sean excluyentes; determinar principios básicos para la asignación de recursos en las universidades; y arancelar la educación a los estudiantes extranjeros no residentes; entre otras.
Esta propuesta se dio a conocer a un día de la segunda marcha en reclamo por fondos para las universidades públicas. La fecha tuvo un significado especial, pues el presidente Javier Milei vetó la ley que aseguraba estos fondos a las pocas horas de terminada la marcha. Desde el oficialismo señalaron repetidas veces la marcha, tachándola de ser realmente «una marcha contra el gobierno«, fundamentado en la presencia de algunos de los miembros más vocales y abiertos con su desaprobación con las medidas del presidente.
