Siempre directo, tajante y sin pelos en la lengua. De esta manera es como se muestra nada más y nada menos que que Rodrigo Lussich, uno de los periodistas más importantes del mundo del espectáculo de nuestro país, quien ha sabido muy bien de qué manera ganarse el cariño del público.
Esta vez, fue noticia debido a lo que comunicó en su programa de Canal Trece, en torno a lo que sucedió en la entrega de los Martín Fierro de cine. «Apareció la grieta más instalada que nunca y, sobre todo, los reclamos de una industria que está paralizada, como es el cine, entonces la gente que la integra no hizo más que reclamar. Después los tonos, a veces los compartís más o menos, algunos se fueron al demonio, otros quedaron muy tibios», sostuvo el conductor uruguayo.
«Las caras tan importantes que había tienen que ver con el momento. Ese era el lugar donde ellos podían manifestar lo que le está pasando a la industria del cine y a la cultura en general, entonces fueron contentos a hacer esto», sostuvo Nancy Duré.
«No es casual que este año se haya elegido hacer por primera vez un Martín Fierro dedicado al cine, en un momento político donde los dirigentes han decidido no subsidiar determinadas industrias porque no es la única», sostuvo por su parte Mariana Brey.
«No creo en las casualidades, creo que fue el año ideal para que esto se pueda visibilizar. A mí esta manera de protestar me parece mucho más piola que cualquier otra que parece que dan miedo», arremetió la panelista. Sin embargo , esto no fue todo.
«Como todo Martín Fierro, esto que se votó pertenece al año pasado, a la gestión de un gobierno anterior donde también hubo poco cine. Me parece que hay que ser justo a la hora de hablar y decir todo. El problema es que no podés pensar diferente, no podés tener un Francella que diga ´que existan los privados para bancar este tipo de cosas’ y vos podés no estar de acuerdo pero hay que dejar que cada uno opine», siguió Mariana Brey.
«Ahora hoy hay un gobierno que no apoya esas decisiones y hay que respetar porque lo eligió la gente. Apareció la grieta más instalada que nunca y, sobre todo, los reclamos de una industria que está paralizada, como es el cine, entonces la gente que la integra no hizo más que reclamar. Después los tonos, a veces los compartís más o menos, algunos se fueron al demonio, otros quedaron muy tibios», sentenció.