El consumo interno de carne vacuna en la Argentina atraviesa su peor momento en más de dos décadas. Durante los primeros nueve meses de 2024, el consumo cayó un 11,3% en comparación con el mismo período de 2023, alcanzando apenas 1.646 millones de toneladas de res con hueso. Este desplome marca el nivel de consumo más bajo registrado en 26 años.
De acuerdo a un informe de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes y Derivados (CICCRA), a nivel per cápita, el consumo de carne promedio fue de 46,8 kilos por persona en lo que va de 2024, lo que significa una reducción del 12,3% respecto al mismo período del año anterior, es decir, 6,6 kilos menos por habitante. El informe de la CICCRA destaca que esta tendencia negativa es preocupante y refleja una crisis estructural en el mercado de la carne, agravada por la caída en la producción y un estancamiento en la demanda.
El precio de la carne aumentó menos que la inflación interanual
A pesar de que los precios de la carne aumentaron durante el año, estos ajustes quedaron por debajo de la inflación general. Mientras que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) en el Gran Buenos Aires subió un 214% en términos interanuales, los cortes de carne vacuna registraron un aumento del 152,1% en el mismo periodo. Esto significa que, en términos reales, el precio de la carne ha caído, lo que, en teoría, debería haber incentivado el consumo, pero no fue así.
La producción de carne es más baja comparada con el 2023
En cuanto a la actividad de faena, se procesaron 1.192 millones de cabezas de ganado en septiembre de 2024, lo que representa un leve aumento del 2,9% respecto al mes anterior. Sin embargo, en el acumulado del año, la faena cayó un 7,2% en comparación con 2023, con un total de 10.225 millones de cabezas faenadas. La baja en la producción es otro factor que ha impactado en la oferta del mercado interno.
Exportaciones de carne al alza: la buena noticia
A pesar de la caída en el consumo interno, las exportaciones de carne vacuna mostraron un crecimiento del 7,8% en los primeros nueve meses de 2024. Argentina exportó 689,8 mil toneladas de carne, lo que representa un aumento de 50 mil toneladas respecto al mismo período del año anterior.
El contexto económico del país, marcado por una alta inflación y recesión, ha golpeado con fuerza al consumo masivo. Las familias argentinas, que históricamente han tenido al asado como una tradición, se ven obligadas a ajustar sus hábitos alimenticios ante los constantes aumentos de precios y la pérdida de ingresos reales. Esta crisis no solo afecta a los consumidores, sino también a los productores, que enfrentan un escenario de menores márgenes de ganancia.