El presidente Javier Milei dispuso el cierre definitivo del Ente Nacional de Obras Hídricas de Saneamiento (ENOHSA). Se trata de una empresa estatal que tenía como objetivo planificar, ejecutar y administrar obras de infraestructura hídrica y sanitaria en todo el país y controlar la calidad del agua potable y del servicio de saneamiento. Así, el Gobierno nacional amplía el recorte aplicado en la administración pública, tal y como prometió.
El gran argumento el Gobierno para la disolución de esta entidad es que el ente elude el control de gastos que existe en la administración nacional y que si no generan financiamiento no pueden sostenerlo. En este contexto, un nuevo ente estatal cerrará por pedido de Javier Milei, que con su motosierra avanza en el plan de achicamiento estatal hasta el déficit cero.
Un detalle a tener en cuenta es que los empleados de ENOHSA no quedarán sin trabajo porque serán reubicados a otros entes o empresas públicas. De hecho, este proceso ya comenzó y todavía falta la designación de más personas. En total se trata de un lugar que le daba trabajo a 358 personas en diciembre pasado, lo que representa una importante distribución de capital humano.
La motosierra continúa
El caso más cercano de cierre de un ente estatal es el de la empresa ferroviaria Trenes Argentinos Capital Humano (DECAHF), lo que representó un ahorro de 42.000 millones de pesos anuales para el Gobierno, con al despido de 1.388 empleados, incluyendo los 23 cargos jerárquicos que cobraban entre 2 y 4 millones de pesos mensuales.
Seguido a esto, el Gobierno avanzó para el cierre de la Casa de la Moneda, encargada de la impresión del dinero, en papel y metal, con curso legal en el país, y el despido de todos sus empleados. La idea es que estas funciones que cumple este ente pasen a manos de un privado que se le adjudicará el trabajo mediante una licitación.
La última semana se anunció que el Gobierno suspendió las internaciones en el Hospital Nacional de Salud Mental Lic. Laura Bonaparte, el cual es el único en todo el país que trabaja los 365 días del año, las 24 horas. Los empleados y empleadas del lugar realizaron un abrazo simbólico en defensa del establecimiento que atiende a más de 20.000 personas por año.
El temor de estos empleados es que se cierre este ente que trabaja en la salud mental de las personas y que tiene guardia e internaciones constantes, además de un sistema de atención en línea. Sin embargo, desde el Gobierno sostienen que con 19 internaciones diarias la proporción es baja para los 17.000 millones de pesos anuales que recibían y que serán reasignados.
