En plena sesión en la Cámara de Diputados del Congreso para debatir el veto del presidente Javier Milei a la ley de financiamiento universitario, la Universidad de Buenos Aires (UBA) hizo pública una carta abierta dirigida a los legisladores. Firmada por su rector, Ricardo Gelpi, la misiva expresa la profunda preocupación de la institución ante la posibilidad de que el veto presidencial se mantenga, poniendo en peligro la continuidad del sistema universitario público.
En su escrito, Gelpi advirtió que las universidades argentinas están atravesando una situación «sin precedentes» en la historia democrática del país y que, si se mantiene el veto, el sistema podría llegar a un «punto sin retorno».
La UBA destacó su trayectoria como una de las principales universidades del mundo y la más prestigiosa de América Latina. «La Universidad de Buenos Aires integra el 1% de la élite de las universidades de todo el mundo», señaló Gelpi. Sin embargo, también aseguró que para mantener estos estándares de calidad es imprescindible una inversión constante, la cual se ve amenazada por la decisión de Milei.
El rector de la UBA alertó que, de continuar el escenario actual, el sistema universitario tal como se conoce hoy podría desaparecer. «Estaremos en un punto sin retorno donde todo el sistema deje de existir tal cual hoy lo conocemos», insistió, en alusión a la falta de recursos que podría generarse si no se deroga el veto presidencial.
Gelpi pidió a los legisladores que mantengan el compromiso con la educación pública, recordando que en campañas electorales siempre se promete fortalecerla. «La educación es la principal apuesta a un futuro mejor. Honren su lugar y voten para ratificar una ley que nos asegure que la universidad pública va a seguir existiendo», sentenció, en lo que representa un llamado directo a los diputados antes de una votación que podría definir el destino del financiamiento universitario en Argentina.
Contexto del veto de Milei
El veto de Milei, que bloquea una ley destinada a incrementar el financiamiento de las universidades, ha generado una fuerte resistencia en diversos sectores educativos y políticos. La norma sancionada buscaba aliviar la emergencia salarial en el sector universitario y establecer criterios más objetivos para la asignación del presupuesto. Sin embargo, el mandatario argentino decidió frenar su aplicación, argumentando que generaría un aumento en el gasto público que el país no puede afrontar.
La sesión decisiva en Diputados
Mientras se debatía el veto, el Congreso permanece bajo tensión por las movilizaciones estudiantiles y la posibilidad de que la oposición logre revertir la medida. El oficialismo necesita que un tercio de los diputados apoyen el veto para que quede firme, y los primeros indicios apuntan a que podría obtener los votos necesarios. En caso de que la oposición consiga mayoría, la ley de financiamiento universitario pasará al Senado para una nueva discusión, donde es casi seguro que el Gobierno fracase, ya que el kirchnerismo es mayoría en esa cámara.
