El portavoz presidencial, Manuel Adorni, anunció el cierre definitivo de la ex Ciccone Calcográfica, en un movimiento que forma parte de la reestructuración de la Casa de Moneda. Adorni dijo que es para reducir gastos del Estado y explicó: «Se trata de una imprenta estatal con severas ineficiencias que se encarga de imprimir billetes, pasaportes, patentes de autos y estampillas».
«El Gobierno Nacional va a avanzar con la disolución de la Compañía de Valores Sudamericana, la ex Ciccone Calcográfica, recordada por uno de los casos de corrupción más grandes de las últimas décadas», señaló, Adorni haciendo referencia a la adquisición de la empresa durante la gestión del exvicepresidente de la Nación, Amado Boudou, con una empresa fantasma.
«La mala administración de la gestión anterior representó un verdadero despilfarro de recursos con deudas que hoy ascienden a los 371.000.000 de dólares, un patrimonio negativo de 78.000.000 de dólares y un resultado bruto negativo de 20.500.000 dólares», afirmó, economista libertario en una conferencia en Casa Rosada.
Entre las razones para la reestructuración, el actual ministro de Comunicaciones y Medios criticó la negativa del gobierno anterior a emitir billetes de mayor denominación, lo que resultó en enormes gastos para el país. «Desde el año 2020 se gastaron 4.700 millones de dólares en importar billetes», puntualizó.
Adorni también señaló el excesivo gasto en la gestión de recursos humanos y otros inmuebles de la Casa de Moneda. «Descubrimos otros gastos extras. Al número total de los gastos se le suma la incorporación de 211 personas que hicieron crecer la dotación a más de 1.300 empleados y la financiación de cuatro inmuebles«, explicó. Uno de los ejemplos más polémicos es un jardín de infantes llamado «La Monedita«, que según Adorni, gastaba 1.200.000 pesos por niño al mes.
El jardín de infantes de la Casa de la Moneda
«La Monedita es paradigmático porque tenía 60 niños que iban allí al jardín y había 31 personas empleadas. Había prácticamente, cada dos chicos, una persona allí contratada«, denunció. También criticó que el servicio médico de la Casa de Moneda, que en cuatro años pasó de tener dos empleados a ocho, gastaba 370.000 dólares por año. «Imaginen el presupuesto, el despilfarro que hasta tenían dinero para administrar dentro de este delirio un jardín de infantes», agregó.
Adorni afirmó que la reestructuración de la Casa de Moneda es un paso clave para mejorar la eficiencia del Estado y controlar la inflación. «En la Argentina, que ya no imprime billetes para financiar la política, la verdad es que poco sentido tiene seguir con este absoluto despilfarro para mantener una estructura al servicio de los degenerados fiscales», cerró.
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— La Derecha Diario (@laderechadiario) October 3, 2024