Maximiliano Ferraro, Diputado Nacional por la Ciudad de Buenos Aires y Presidente de la Coalición Cívica ARI, expresó este sábado sus críticas al veto presidencial sobre la Ley de Financiamiento Universitario. En una entrevista con CNN Radio, durante el programa Aire de Mañana, Ferraro desglosó los efectos negativos que, según él, generará esta decisión en el funcionamiento de las universidades públicas del país.
Ferraro sostuvo que el veto afecta directamente el financiamiento de las universidades, comprometiendo los recursos destinados a los gastos operativos, así como la recomposición salarial de docentes y personal no docente. Además, destacó que la medida también golpea áreas claves como los hospitales y colegios universitarios. «Se vetó la posibilidad de garantizar fondos esenciales«, afirmó, y explicó que esto profundiza la crisis que ya atraviesa el sistema educativo.
El diputado no se quedó solo en la crítica al veto, sino que también puso el foco en la eliminación de auditorías y en los cambios propuestos para repensar la distribución de los fondos universitarios. Según Ferraro, estos mecanismos eran fundamentales para asegurar la transparencia y la correcta asignación de los recursos. «Ahora viene una discusión importante: trabajar para que en el presupuesto de 2025 se garantice lo que fue vetado«, enfatizó, anticipando un nuevo debate legislativo.
Ferraro también aprovechó la ocasión para cuestionar la gestión económica del gobierno de Javier Milei, enfocándose en el manejo del gasto tributario. Según el legislador, en los primeros seis meses de la actual administración se «manotearon» aproximadamente 798 mil millones de pesos. En ese contexto, criticó la alianza entre Milei, Sergio Massa y el kirchnerismo para prorrogar el presupuesto, lo que, según él, permite al Ejecutivo manejar los fondos públicos con discrecionalidad.
El presidente de la Coalición Cívica también abordó la situación económica general del país, señalando que la Argentina está en una «recesión profunda», que impacta de manera severa en el poder adquisitivo de sectores como los jubilados y la clase media. Aunque coincidió en ciertos aspectos del enfoque del gobierno, subrayó su desacuerdo con la falta de apoyo a las empresas y la profundización de la crisis.
Finalmente, Ferraro fue tajante en su conclusión: “El presidente no tolera leyes que no se construyan dentro de su espacio político”. Criticó la falta de empatía y responsabilidad social del gobierno actual, y expresó su preocupación por el uso frecuente de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), lo que calificó como una «exageración» y una señal de un gobierno que, según él, «miente».