El pasado viernes 13 de septiembre el Senado convirtió en ley el proyecto de financiamiento universitario. Esta norma obliga al Poder Ejecutivo a actualizar las partidas presupuestarias para los salarios de docentes y no docentes, cubrir gastos de funcionamiento, proyectos especiales, programas de Ciencia y Tecnología, Extensión Universitaria y extensión en las universidades. Instantes después de conocerse su aprobación, el presidente Javier Milei anunció que la vetará y tiene tiempo hasta mañana para hacerlo, por eso la marcha universitaria en Plaza de Mayo de esta tarde.
En cuanto a salarios docentes, la iniciativa establece la obligatoriedad de recomponer lo perdido desde el 1 de enero de 2024 y luego actualizar hasta el 31 de diciembre de forma mensual, de acuerdo a la inflación informada por el INDEC, la cual se estima que para el mes de septiembre será menor al 4%, por ejemplo, aunque meses anteriores fue más.
El argumento de Javier Milei para vetar esta ley es que genera un impacto fiscal de 735.598 millones de pesos, un 0,14% del PBI. Con este dato en mano, en La Libertad Avanza se niegan a que la ley entre en vigencia, mientras que personal docente, no docente y estudiantes marchan en Plaza de Mayo en rechazo al veto del mandatario argentino.
Desde noviembre del 2023, los salarios docentes cayeron un 23,7% en términos reales, mientras que los ingresos de investigadores y residentes es más grave y la caída oscila en torno al 40%. En este sentido, las transferencias a universidades cayeron un 30,1% contra el mismo período del año pasado (de enero a agosto), y además en lo que va del 2024 no hubo ejecución de partidas para gastos de capital.
Marcha en Plaza de Mayo
Ante este veto de Javier Milei, gremios docentes, no docentes, estudiantes y sindicatos se movilizan a Plaza de Mayo para pedir la recomposición salarial de los trabajadores y más partidas presupuestarias para las universidades públicas. El acto central será a las 17:00, aunque las primeras columnas han comenzado a llegar al lugar desde diferentes puntos de la Ciudad de Buenos Aires.
A su vez, en otros puntos del país también hay movilizaciones y protestas, tanto en la puerta de cada recinto educativo, como también en plazas centrales o casas de gobierno. A pesar de este contexto, el Gobierno no daría marcha atrás y mantendría su postura en contra de la ley de financiamiento universitario que garantiza la recomposición salarial docente.
