El gobierno de Javier Milei está preparando un plan para privatizar parcialmente la empresa estatal de telecomunicaciones Arsat, con el objetivo de incorporar capital privado. La iniciativa, que se enmarca en la estrategia de reducción del Estado, apunta a la venta del 49% de las acciones, dejando intacto el 51% reservado a las acciones Clase A.
Según informó el presidente de Arsat, Mariano Greco, durante las Jornadas Internacionales 2024 organizadas por ATVC y CAPPSA, el proyecto contempla la «salida a Bolsa» como una posible opción para privatizar este porcentaje de la compañía, aunque todavía no se han tomado decisiones definitivas al respecto. El objetivo principal de esta medida es atraer inversores que ayuden a expandir y modernizar la infraestructura de la empresa, que actualmente opera en diversos sectores clave de telecomunicaciones.
Entre las principales áreas de acción de Arsat se encuentran el segmento satelital, con los satélites geoestacionarios Arsat 1 y 2 en órbita, y la Red Federal de Fibra Óptica, que cuenta con una red troncal de más de 35.000 kilómetros. Además, la empresa es responsable de la Televisión Digital Terrestre (TDA), que cubre el 90% del país con 102 torres en funcionamiento, y opera uno de los data centers más potentes de América Latina.
Arsat también posee espectro radioeléctrico de 4G y 5G, aunque este recurso aún no está en uso. Con la privatización parcial, el gobierno espera impulsar la expansión de estos servicios, especialmente en un contexto de creciente demanda tecnológica y conectividad digital en el país.
El objetivo del Gobierno de Javier Milei con Arsat
Según Greco, la idea es transformar a Arsat en una empresa más competitiva en el mercado. «Durante mucho tiempo, Arsat fue un vehículo de políticas, más que una empresa», afirmó. En ese sentido, la apertura a capital privado y la cotización en Bolsa son vistas como pasos necesarios para potenciar su crecimiento y rentabilidad.
El plan de privatización de Arsat ha generado cierta controversia, ya que el Congreso había excluido a la empresa de la lista de privatizables durante el debate del proyecto de Ley de Bases. Sin embargo, el gobierno de Milei defiende la medida como parte de su política de ajuste fiscal y reducción del tamaño del Estado.