En un hito histórico para Sudamérica, Argentina y Brasil firmaron un acuerdo que permitirá que el gas natural argentino llegue al mercado brasileño, diversificando la matriz energética de ambos países y fortaleciendo los lazos comerciales. Fue en el marco de la cumbre del G20, donde el ministro de Economía Luis Caputo y su par brasileño de Minas y Energía, Alexandre Silveira, pusieron la firma a un convenio que entrará en vigor en 2025.
Este acuerdo, que prevé un aumento gradual de los envíos hasta alcanzar los 30 millones de metros cúbicos diarios en cinco años, representa un punto de inflexión para la integración energética regional. En tanto, pondera el potencial energético de Vaca Muerta, la formación geológica argentina rica en gas y petróleo no convencional que ha puesto a Sudamérica en el centro de la escena energética mundial.
En su cuenta de X, el funcionario brasileño había dado a conocer la noticia con suma algarabía al considerar que el acuerdo implicará “gasolina más barata para Brasil”. “Firmé con el Ministro de Economía argentino, Luis Caputo, el Memorando de Entendimiento para traer gas de Vaca Muerta a Brasil. La previsión es que las importaciones brasileñas de gas natural de nuestros vecinos se realicen a través de 5 rutas”, escribió Silveira.
En esta línea, remarcó: “Queremos aumentar la oferta de gas en Brasil y en consecuencia reducir el precio”. A su vez, el funcionario de la administración de Luiz Inácio Lula da Silva aseveró: “Necesitamos tratar el gas como una energía de transición, aumentar el volumen para reducir el precio y reindustrializar Brasil, generando más oportunidades para nuestro pueblo”.
Para Argentina, la exportación de gas a Brasil permitirá aprovechar de manera más eficiente las reservas de Vaca Muerta, generando ingresos adicionales para el país y fortaleciendo su posición como exportador de energía. Mientras que el acceso al gas argentino por parte de Brasil contribuirá a diversificar su matriz energética, reduciendo la dependencia de otras fuentes de suministro y estabilizando los precios del gas en el mercado interno. Además, permitirá impulsar la industria y generar empleo en diversos sectores.
El acuerdo contempla el análisis de cinco posibles rutas para transportar el gas argentino a Brasil, cada una con sus propias características y desafíos. 1) Gasoducto Brasil-Bolivia (Gasbol): Esta es la opción más directa, pero requiere adaptaciones para revertir el flujo del gas. 2) Corredor Paraguay: Esta alternativa, que no involucra a Bolivia, ofrece una mayor flexibilidad y podría ser una opción a largo plazo. 3) Ruta Formosa-Asunción-Campo Grande: Esta opción es más corta y permitiría abastecer tanto a Paraguay como a Brasil.
La implementación de este proyecto representa un desafío logístico y financiero significativo. Pues, se requerirán inversiones importantes en infraestructura, así como la coordinación de múltiples actores a nivel gubernamental y privado. La exportación de gas de Vaca Muerta a Brasil es un paso fundamental hacia la construcción de un mercado energético regional integrado y sostenible.
Este proyecto no sólo fortalecerá los lazos comerciales entre ambos países, sino que también contribuirá a la transición energética global, promoviendo el uso de fuentes de energía más limpias y eficientes. El acuerdo marca el inicio de una nueva era en la cooperación energética regional. Vaca Muerta vuelve a ser un actor clave, ofreciendo nuevas oportunidades de desarrollo y crecimiento económico para toda la región.