Por el conflicto con los gremios aeronáuticos, las autoridades de Aerolíneas Argentinas organizaron reuniones con los tres sindicatos más grandes y pactaron una «tregua temporal» hasta finalizar las negociaciones. Los secretarios gremiales de la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA), de la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), y de la Asociación de Personal Aeronáutico (APA) serán recibidos en distintos momentos por los directivos de Aerolíneas en Aeroparque.
La primera reunión tuvo por protagonista a APLA, que no contó con la presencia de Pablo Biró, en cambio se vio representada por Mateo Ferrería. El secretario gremial destacó que la reunión fue positiva y afirmó que dialogó con la empresa «en buenos términos pero con conceptos duros«. Sobre la propuesta que llevó a las autoridades de Aerolíneas señaló: «Fue una propuesta integral, como pidió el Gobierno, apara ciertas mejoras que creemos que deben empezar a ocurrir. Las recibieron de buenas manera«.
En medio de la tensión, el presidente Javier Milei dijo enfáticamente: «En Argentina se sale laburando, no parando o extorsionando«. Además de esta frase, el Gobierno nacional amenazó con «cerrar Aerolíneas Argentinas» de continuarse las medidas de fuerza que impidieran la salida de los vuelos; a la vez que intentaron aleccionar a los gremios con el despido de 15 empleados de Intercargo y el anuncio de la desregulación del servicio de rampas en todos los aeropuertos.
La negociación APLA con Aerolíneas pasó a un cuarto intermedio hasta el lunes, al igual que sucedió con AAA. La última reunión será con APA, que abarca a los trabajadores de Intercargo y, al igual que los otros dos gremios, exige una recomposición salarial que rondaría el 90%. APA y Aerolíneas deberán trabajar para no solo negociar los nuevos salarios, sino también para aplacar al Gobierno Nacional, que busca privatizar Aerolíneas y ya avanzó sobre los privilegios de Intercargo.
Por su parte, el secretario General de APA, Edgardo Llano, apuntó contra el Gobierno por sus medidas y dichos. Primero, el jueves 7, luego del paro de Intercargo que generó críticas por su modalidad, Llano defendió a los manifestantes y aseguró que «no habían secuestrado a nadie y que estaban comparando al sindicato con Hamas». Al mismo tiempo advirtió al Gobierno por los despidos de trabajadores de Intercargo: «Los vuelos del sábado no van a salir o van a tener demoras por la falta de personal».