El PRO, bajo el liderazgo de Jorge Macri, está evaluando la posibilidad de adelantar y desdoblar las elecciones en la Ciudad de Buenos Aires, con el objetivo de evitar una confrontación directa con el presidente Javier Milei y su espacio político, La Libertad Avanza. Esta estrategia busca minimizar el impacto que podría tener la influencia de Milei en las elecciones locales y asegurar el control del macrismo en el distrito porteño.
Históricamente, la autonomía porteña ha sido utilizada como argumento para separar las elecciones locales de las nacionales, como ocurrió en 2011 y 2015 durante la gestión de Mauricio Macri. Sin embargo, en 2019 y 2023, se optó por unificar los comicios para optimizar recursos y simplificar el proceso electoral para los ciudadanos.
En esta ocasión, Jorge Macri considera que adelantar las elecciones legislativas porteñas podría ser beneficioso para el PRO. Sería la primera vez que una elección legislativa intermedia en la Ciudad se realizaría en una fecha distinta a la nacional desde que el partido gobierna el distrito.
Además de las consideraciones políticas, desde el gabinete porteño señalan cuestiones técnicas como justificativo para el desdoblamiento. La Ciudad utiliza el sistema de Boleta Única Electrónica (BUE), mientras que a nivel nacional se implementará la Boleta Única Papel (BUP). Esta diferencia en los sistemas de votación podría complicar el proceso electoral si se realizan simultáneamente.
Estrategia política y relaciones con LLA
El principal objetivo del PRO es evitar que la campaña de los candidatos nacionales, especialmente la figura de Manuel Adorni por La Libertad Avanza, potencie a los libertarios en el ámbito local. Macri busca fortalecer la presencia de su partido en la Legislatura porteña y minimizar el impacto de los candidatos de Milei, quienes podrían no tener la misma fuerza a nivel local.
Aunque existe un acercamiento con Ramiro Marra, excandidato a jefe de gobierno por LLA y actualmente distanciado del círculo cercano de Milei, el jefe de Gobierno porteño intenta consolidar su base de apoyo y asegurarse de que el PRO mantenga el control en la Ciudad.
En caso de desdoblar las elecciones, Macri estaría dispuesto a eliminar las primarias locales, decisión que requeriría 40 votos en la Legislatura, la misma cantidad necesaria para la reforma constitucional que impulsa.
Tensiones internas y desafíos futuros
Las relaciones entre el PRO y LLA han mostrado altibajos. Mientras que algunos sectores del macrismo buscan acuerdos con los libertarios, otros prefieren mantener distancia. Jorge y Mauricio Macri han tenido diferencias sobre la mejor estrategia para relacionarse con el gobierno nacional y sus representantes.
Ambos coinciden en que el principal adversario del PRO en la Ciudad no es el peronismo ni la UCR, sino La Libertad Avanza. La preocupación es que el espacio de Milei pueda ganar terreno y poner en riesgo el control histórico del PRO en el distrito porteño.
En el contexto nacional, el PRO enfrenta el desafío de renovar 22 de los 37 diputados que pone en juego, sabiendo que es difícil retener todos los escaños, especialmente en la provincia de Buenos Aires.
Algunos dirigentes del PRO advierten sobre el riesgo de alejarse de su electorado en el afán de diferenciarse del gobierno nacional. Recuerdan que estrategias similares no dieron resultados favorables en el pasado. Por otro lado, consideran que una confrontación directa con Milei podría fortalecer al presidente y debilitar al PRO en su bastión histórico.