En otro revés judicial para el ex presidente Alberto Fernández, la Cámara Nacional en lo Civil sentenció que el ex mandatario debe destinar un 30% de su jubilación de privilegio a su ex pareja y ex primera dama, Fabiola Yañez, en concepto de alimentos provisorios para su hijo en común, Francisco.
La Cámara había dictado el fallo en septiembre, pero la defensa de Alberto Fernández intentó apelar aunque sin éxito. Según Infobae, la Sala E de la Cámara confirmó el fallo de septiembre. Actualmente, Alberto Fernández cobra una jubilación de privilegio de 17 millones de pesos, por lo que a Yañez corresponderían poco más de 5 millones.
Este monto es provisorio hasta que se establezca una cuota fija por los alimentos. Actualmente, el caso que involucra al ex presidente y a quien fue su pareja se encuentra en una etapa conciliar, donde ambas partes intentan llegar a un acuerdo económico. Los jueces que ratificaron el fallo fueron Marisa Sorini, Ricardo Li Rosi y José Fajre; los mismos señalaron: «Según el art. 544 del Código Civil y Comercial de la Nación, los alimentos provisorios están destinados a satisfacer las necesidades impostergables del alimentado durante un breve lapso que debe durar hasta el dictado de una sentencia».
Los magistrados también señalaron que el monto que se le impuso al ex presidente será «suficiente para atender las necesidades del beneficiario, que no resultará perjudicado por las demoras que acontezcan mientras transcurra el proceso«. El beneficiario en este casi sería Francisco Fernández Yañez, el hijo del ex presidente y quien fue su pareja hasta comienzos de año. La puja por los alimentos es una de las tangentes que surgieron de la denuncia por violencia de género que presentó Fabiola Yañez contra el ex mandatario.
A raíz de conversaciones entre Yañez y Maria Cantero, histórica secretaria de Alberto Fernández, se descubrió el supuesto caso de violencia. El juez Julián Ercolini manifestó en su acusación: «El imputado se habría aprovechado de una especial situación de vulnerabilidad preexistente al vínculo en el que se encontraba la víctima, y ejerció con habitualidad y de modo continuo violencia psicológica contra Yañez bajo las formas acoso, hostigamiento, controles, indiferencia, insultos, culpabilización, destrato, retiro de la palabra, ninguneo y hostilidad».
En la acusación, Ercolini señaló que esta situación se vivió desde aproximadamente 2016 hasta agosto de 2024, fecha en la que se presentó la denuncia formal. El juez también manifestó que la violencia, especialmente la física, tuvo un escalado en su intensidad durante el periodo en el que Fernández sirvió como presidente, más precisamente durante el embarazó de Yañez.