El reciente fracaso del bloque de diputados de PRO para impulsar el proyecto de “Ficha Limpia” ha puesto de manifiesto un posible pacto en ciernes entre La Libertad Avanza (LLA) y el kirchnerismo duro. Este segundo intento fallido no solo revela la fragilidad de las alianzas dentro del oficialismo, sino que también anticipa un escenario político altamente polarizado de cara a las elecciones de 2025.
El proyecto de ley de “Ficha Limpia”, que buscaba complicar la candidatura de Cristina Kirchner para las elecciones de 2025, fue nuevamente rechazado en la Cámara de Diputados. Este revés representa el segundo intento fallido de PRO para aprobar una iniciativa que, de materializarse, habría restringido la participación de la expresidenta en las próximas elecciones. La negativa al proyecto desnuda el posible acuerdo entre LLA y sectores kirchneristas, evidenciando un interés común en mantener el status quo político.
Un pacto tácito en desarrollo
El fracaso del proyecto se interpretó rápidamente como un gesto de apoyo hacia el kirchnerismo. La ausencia de La Libertad Avanza en la votación, marcada por ocho bajas significativas, sugirió una maniobra estratégica para favorecer al oficialismo. Patricia Bullrich también fue señalada como una figura clave en la implosión de su propio partido, el PRO, exacerbando las tensiones internas y contribuyendo al fracaso del proyecto.
Este comportamiento ha sido interpretado como un intento del oficialismo por consolidar su poder en la Cámara de Diputados, permitiendo la reelección de Martín Menem como presidente del cuerpo legislativo. La reelección de Menem, adlátere de Karina Milei, se perfila como el primer paso hacia una agenda más conciliadora. En consecuencia, podría incluir la derogación de la ley de primarias abiertas y obligatorias (PASO). Y así facilitando así una mayor polarización electoral entre Javier Milei y Kirchner.
Conflictos internos y estrategias políticas
La intervención de Bullrich, al retirar a los diputados José Núñez y Gabriel Chumpitaz, fue crucial para el desenlace del proyecto. Núñez, que había faltado previamente sin aviso, se despidió disculpándose con sus compañeros. Mientras que Chumpitaz también se ausentó, debilitando aún más la posición de PRO en la votación.
Este doble juego interno evidenció la desconfianza dentro de la bancada macrista. Además, la firma de la senadora Lucía Corpacci, días atrás, al dictamen del federal Ariel Lijo a la Corte Suprema reforzó el apoyo kirchnerista.
Menem y la derogación de las PASO
La reelección de Martín Menem como presidente de la Cámara de Diputados se anticipa como una consecuencia directa del fracaso del proyecto de Ficha Limpia. Este triunfo fortalecería la posición del oficialismo en el legislativo y facilitaría la aprobación de iniciativas clave, como la derogación de las PASO. La eliminación de esta ley permitiría una mayor flexibilidad en la organización de las elecciones, beneficiando al oficialismo y limitando las opciones de opositores.
Reacciones y futuras alianzas
Ante el resultado de la votación, Germán Martínez, jefe de la bancada kirchnerista, advirtió que la decisión de Menem aún está en suspenso. Mientras tanto, las ausencias de los diputados Jorge Rizzotti y Natalia Sarapura, atribuidas a decisiones de sus respectivos gobernadores, Carlos Sadir y Gustavo Valdés, reflejan una resistencia por parte de otros sectores del oficialismo para apoyar plenamente las iniciativas del gobierno central.
La posibilidad de que Emilio Monzó tome la presidencia de Diputados añade una capa adicional de incertidumbre y competencia dentro de las filas oficiales. Este cambio podría influir significativamente en la dinámica legislativa y en la capacidad del gobierno para implementar sus reformas pendientes.