La Legislatura de la provincia de Neuquén decidió este miércoles suspender a la vicegobernadora Gloria Ruiz, quien se encuentra en el centro de un escándalo de corrupción que involucra a su hermano, Pablo Ruiz. La medida, tomada tras días de tensiones políticas, fue aprobada con 29 votos a favor y 5 en contra, reflejando una amplia mayoría, aunque sin unanimidad.
El caso, que sacudió la política local, comenzó el pasado viernes cuando el Ministerio Público Fiscal (MPF) de Neuquén ingresó a las dependencias de la Legislatura con una orden judicial del juez Juan Manuel Kees. Durante el operativo, se requirió documentación relacionada con presuntos movimientos financieros sospechosos que podrían estar vinculados a plazos fijos gestionados por Pablo Ruiz, quien se desempeñaba como coordinador de la institución legislativa.
La defensa de Gloria Ruiz
Antes de la votación, Gloria Ruiz utilizó su cuenta en la red social X (antes Twitter) para denunciar que la situación era un “golpe de Estado a la democracia”. En su publicación, aseguró que el proceso tenía motivaciones políticas y que los acontecimientos reflejaban una persecución en su contra.
En un intento por calmar las aguas, la vicegobernadora había anunciado días atrás el apartamiento de su hermano del cargo que ocupaba, argumentando que esta decisión era “indispensable para garantizar la transparencia en la investigación”. Sin embargo, esta medida no logró revertir el clima de desconfianza que se instaló en la Legislatura y en gran parte de la sociedad neuquina.
Impacto político y social
La suspensión de Ruiz marca un momento crítico para la política provincial. Los movimientos financieros bajo sospecha y la implicación de una figura cercana a la vicegobernadora generaron un fuerte impacto en la opinión pública. Para algunos sectores, esta situación evidencia la necesidad de reforzar los mecanismos de control institucional en el manejo de recursos públicos.
Desde el oficialismo, se evitó realizar declaraciones contundentes más allá de la votación en el recinto, aunque algunos legisladores aseguraron que la medida es “un paso necesario para garantizar el correcto funcionamiento de las instituciones”.
Mientras tanto, la oposición acusó al gobierno provincial de haber actuado tarde y de intentar minimizar un caso que pone en jaque la credibilidad de los principales actores políticos.
Un desenlace incierto
Con la suspensión de Gloria Ruiz, se abre un nuevo capítulo en la política neuquina. Aunque la investigación judicial continúa, el futuro de la vicegobernadora parece cada vez más comprometido. Por ahora, el desafío principal será restaurar la confianza en las instituciones y responder a las demandas de transparencia de una ciudadanía que observa con preocupación los escándalos de corrupción en la provincia.