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POLÍTICA

Spa y servicio de catering: el INCAA derrocha $188 millones en hoteles de lujo con plata de todos los argentinos

Los nominados al Festival Internacional de Cine de Mar del Plata van a pasar varias noches en hoteles de 5 estrellas pagados por el Estado argentino.

INCAA

El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) destinó $188.070.000 a estadías en hoteles cinco estrellas para la 39ª edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, que se llevará a cabo del 21 de noviembre al 1 de diciembre. El monto incluye servicios de spa, catering y otras comodidades exclusivas para las estrellas y participantes del evento.

De acuerdo a datos recopilados por la agencia NA, el gasto principal recae sobre Hermitage S.A., con un contrato de $167.250.825 a través de una Contratación Directa por Exclusividad (87-0022-CDI24). Este procedimiento fue respaldado por una carta de la Federación Internacional de Asociaciones de Productores Cinematográficos (FIAPF), que destacó la cercanía y trayectoria de los hoteles Hermitage y NH Gran Hotel Provincial, ubicados junto a la sede del festival.

Entre las comodidades contratadas figuran habitaciones con desayuno buffet, seguridad privada, minibar, productos de higiene premium, televisores, camas sommier y acceso a spa, piscina y gimnasio. También se incluyen servicios de emergencias y restaurantes cinco estrellas, garantizando una experiencia de lujo para los invitados nacionales e internacionales.

La justificación que dio el INCAA

El INCAA argumentó que estas contrataciones son fundamentales para cumplir con los estándares internacionales del festival, el único en América Latina reconocido como Clase A. Sin embargo, el gasto también incluyó una partida adicional de $20.400.000 para alojar al personal técnico en un hotel cuatro estrellas, ubicado a menos de 700 metros de la sede central.

La modalidad de orden de compra abierta permite al INCAA pagar únicamente los servicios utilizados, aunque el presupuesto total ya fue aprobado. Este esquema busca garantizar flexibilidad en los gastos, aunque los montos elevados han generado controversia entre críticos que cuestionan el uso de fondos públicos.

Los organizadores defienden la inversión como una necesidad para posicionar al Festival de Mar del Plata entre los eventos cinematográficos más importantes del mundo.

A pocos días del inicio del festival, el evento se perfila como una celebración del cine y un atractivo para el turismo en la ciudad. Sin embargo, la magnitud de los gastos sigue generando debate sobre la transparencia y las prioridades en la asignación de recursos públicos.