Victoria Villarruel devolverá el golpe a Javier Milei

POLÍTICA

Victoria Villarruel devolverá el golpe a Javier Milei: ausencias en el gabinete y discusiones sobre «alta política»

La vicepresidente se reunió con su círculo íntimo y resolvió contestar al presidente, pero esperará el momento oportuno.

La vicepresidente Victoria Villarruel tomó ayer una decisión política crucial al decidir no permanecer en silencio ante las acusaciones que realizó el presidente Javier Milei, poniendo en tela de juicio la integridad del binomio que ganó las elecciones hace un año con el porcentaje más alto de la historia. Aunque aún no ha definido cómo ni cuándo lo hará, Villarruel anunció que realizará algunas “aclaraciones” sobre los comentarios del mandatario.

Durante una reunión con su equipo, la vicepresidente evaluó el impacto político de las críticas públicas de Milei. Fuentes parlamentarias señalaron que la intención es evitar una escalada que agrave aún más una situación ya deteriorada y, por ahora, irreversible. “Hay que tener, por encima de todo, responsabilidad institucional”, comentaron.

Este conflicto surge a pocas horas de la presentación del informe del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en el Senado, mientras Villarruel enfrenta presiones del kirchnerismo para apoyar proyectos que contravienen los intereses del gobierno nacional, incluyendo el rechazo al DNU que permite al Ejecutivo renegociar la deuda pública sin los requisitos de la Ley de Administración Financiera.

Reunión decisiva y estrategias futuras

La decisión de responder a Milei se tomó ayer por la tarde en el despacho de Villarruel, junto a su grupo de confianza más cercano. Durante una merienda improvisada con medialunas, infusiones y agua, la vicepresidenta repasó las reacciones dentro del oficialismo ante las declaraciones de Milei y, tras escuchar a sus asesores, resolvió realizar algunas aclaraciones en el momento que considere oportuno, posiblemente a través de redes sociales o una entrevista.

Dos temas principales podrían ser abordados en las aclaraciones de Villarruel: su supuesta negativa a asistir a reuniones de gabinete y su referencia al “círculo rojo” y la “alta política”. Milei calificó a Villarruel diciendo: “Villarruel no tiene ningún tipo de injerencia en la toma de decisiones. No participa de las reuniones de Gabinete. Decidió no participar. Hace mucho tiempo que decide no participar en las reuniones de Gabinete. El diálogo es lo que se necesita institucionalmente para cumplir con nuestros roles. Ella en su visión, en muchas de las cosas que nosotros hacemos está más cerca del círculo rojo, de lo que ella llama la alta política, y lo que nosotros llamamos la casta”. Estas palabras causaron un gran impacto político.

Antecedentes del conflicto

Las declaraciones de Milei fueron el punto culminante de una ofensiva que el equipo de Villarruel comenzó hace unas tres semanas. Mientras ella aumentaba su presencia con actividades, reuniones y publicaciones en redes sociales, también crecían las críticas de activistas, militantes y dirigentes vinculados a la Casa Rosada. Las denuncias de la diputada Lilia Lemoine y del biógrafo de Milei, Marcelo Duclos, no quedaron en el vacío.

En una entrevista reciente con el canal LN+, Villarruel confirmó que el malestar no provenía de una facción específica, sino de algo más concreto. La desconfianza de Milei hacia Villarruel se remonta a antes del 10 de diciembre y se intensificó con nombramientos polémicos, diferencias en aumentos salariales para senadores, renuncias a jubilaciones de privilegio, crisis diplomáticas y referencias históricas a figuras como Isabel Perón.

Declaraciones recientes y contexto actual

En la entrevista de ayer en el Senado, Villarruel afirmó: “El Senado de la Nación me encanta, me parece hermoso, pero debo decirles que lo que más me gusta y donde más me gusta estar es en el recinto, donde puedo ver la política, la alta política en serio. Realmente es algo único que me gustaría mucho que los argentinos pudieran ver. Las distintas discusiones, el planteo de las leyes, los recursos que hay para avanzar o para entorpecer una ley. Es el lugar donde más cómoda me siento de todo el Senado de la Nación”. Esta declaración fue interpretada por Milei como un indicio de su relación con la “casta” y la “alta política”, elevando aún más la tensión entre ambos.

En la charla de ayer, se recordó que la última reunión de gabinete en la que participó Villarruel fue en la primera quincena de septiembre. Después, hubo viajes y suspensiones propias debido a la dinámica del Gobierno, pero pocas reuniones de gabinete quedaron sin su presencia. No obstante, se evitó mencionar quién tiene la responsabilidad de invitar a esos encuentros en la Casa Rosada.

Salir de la versión móvil