Los precios de la canasta en el interior del país registraron en noviembre aumentos de un promedio mensual de solo un 0,5%, según un relevamiento de la Fundación COLSECOR. Este es el incremento más bajo desde junio de 2021, cuando comenzó este estudio.
La suba de noviembre resulta considerablemente inferior al 1,7% reportado por la Dirección de Estadística de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires para el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas, y también está muy por debajo del 2,8% de inflación general estimada por el Relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central (REM).
Factores detrás del bajo incremento
El comportamiento de los precios en el interior del país parece estar relacionado con la estabilidad en los productos básicos incluidos en la canasta alimentaria, que han registrado menores subas en comparación con otros rubros como salud, transporte o vivienda.
Un informe del Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) arrojó que, en términos internacionales, el costo de una canasta de alimentos en Argentina sigue siendo competitivo. En noviembre, esta canasta de 11 productos costaba 36,4 dólares al tipo de cambio oficial, menos que en Chile (45 dólares) y Uruguay (44,6 dólares), aunque por encima de Brasil (29,1 dólares).
Comparaciones regionales de precios
Dentro de los países analizados, el estudio del IERAL destacó que en Argentina se encuentran alimentos más baratos como la harina de trigo y el aceite de girasol, mientras que otros como el arroz y los fideos presentan precios más altos en comparación con Brasil. En cuanto a Chile y Uruguay, la canasta argentina mostró precios menores en promedio, aunque productos como la leche y el arroz superaron los valores de estos países vecinos.
Costos por grupo familiar
El informe de COLSECOR también calculó los valores necesarios según el tamaño del grupo familiar. Una pareja de adultos mayores necesitó 198.459 pesos para cubrir sus necesidades alimentarias en noviembre, mientras que una familia tipo de cuatro integrantes (dos adultos y dos niños en edad escolar) requirió 408.826 pesos. En tanto, un hogar con cinco miembros necesitó 429.995 pesos para no caer bajo la línea de indigencia.
Un alivio en el contexto inflacionario
El leve incremento en la canasta alimentaria brinda cierto alivio dentro del complejo panorama inflacionario del país. No obstante, las diferencias de precios entre regiones y productos reflejan los desafíos persistentes en el acceso a alimentos y la necesidad de políticas que apunten a garantizar precios accesibles para todos los sectores de la población.
Con la variación registrada en noviembre, se refuerza la importancia de los relevamientos locales, que permiten observar realidades económicas diversas y diseñar estrategias adaptadas a las necesidades de cada región del país.