Ante la falta de acuerdos en el Congreso Nacional sobre el Presupuesto 2025, el presidente Javier Milei decidió prorrogar nuevamente el Presupuesto 2023 del gobierno de Alberto Fernández. El proyecto del Gobierno nacional tenía como condición primaria mantener el equilibrio fiscal alcanzado, lo que terminó demorando su tratamiento y no logró entrar en el año legislativo 2024.
La medida se oficializó a través del Decreto 1131/2024 del Boletín Oficial del 30 de diciembre. «A partir del 1° de enero de 2025, y en virtud de lo establecido en el artículo 27 de la Ley de Administración Financiera y de los Sistemas de Control del Sector Público Nacional N° 24.156 y sus modificatorias, las disposiciones de la Ley 27.701 de Presupuesto General de la Administración Nacional para el Ejercicio 2023», especificó el decreto. A pesar de mantenerse las partidas de 2023, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, «adecuará oportunamente el presupuesto prorrogado«.
Con esta medida, el Gobierno plantea «asegurar la continuidad y eficiencia de los servicios mínimos y esenciales de la Administración Nacional utilizando los recursos, fuentes financieras y créditos vigentes al cierre del Ejercicio 2024«. Tras asumir la presidencia, Javier Milei decidió prorrogar el Presupuesto 2023; para 2025, nuevamente los gastos y partidas deberán reorganizarse para seguir el plan económico del presidente.
La batalla por el Presupuesto
A pesar de las varias victorias que consiguió el oficialismo en el Congreso, con la presentación y posterior debate del presupuesto llegaron a un punto muerto con la oposición y los bloques dialoguistas. A pesar de haber adelantado que podrían buscar un periodo de sesiones extraordinarias durante febrero de 2025, desde el Gobierno Nacional decidieron excluir el Presupuesto en la agenda de las negociaciones.
Sobre la piedra fundacional del Presupuesto, el equilibrio fiscal, el ministro de Economía, Luis Caputo, señaló: «No vale la pena discutir un proyecto que ponga en riesgo el equilibrio». «Sacamos el Impuesto PAÍS, que equivale al 1,5% del PBI. Las provincias van a estar mejor financiadas que la Nación; el esfuerzo grande lo hacemos nosotros». añadió Caputo
Las provincias pidieron a la Nación los fondos de la coparticipación de los Aportes del Tesoro que no fueron transferidos durante el año; la reducción del aporte realizado a los fondos coparticipables por financiamiento a la ex AFIP; el financiamiento de las cajas previsionales no transferidas, que se encontrarían por encima de los $254 millones; la eliminación de las afectaciones específicas del impuesto al combustible; entre otras cosas.
