El senador del PRO, Alfredo de Ángeli sorprendió este jueves al votar en contra de la expulsión de Edgardo Kueider, detenido en Paraguay con 200.000 dólares sin declarar. Aunque había manifestado públicamente su apoyo a la destitución, terminó alineándose con la estrategia del PRO y La Libertad Avanza, que buscaba suspender a Kueider para evitar que su banca fuera ocupada por Stefanía Cora, una dirigente de La Cámpora.
En un encendido discurso previo a la votación, De Angeli aseguró: «Voy a ir por cada uno de los que está procesado y vamos a limpiarlo de corruptos». Además, reclamó la aprobación de la ficha limpia: «Para que cuando vayan a presentarse les digan vos en política no podés estar. Yo voy a votar por la expulsión de Kueider». Sin embargo, su voto final fue en favor de la suspensión y no de la expulsión, priorizando el cálculo político sobre el castigo a su comprovinciano.
La estrategia del PRO y La Libertad Avanza buscaba bloquear la asunción de Cora, quien habría ocupado la banca de Kueider en caso de su expulsión. La dirigente camporista, considerada una cristinista de línea dura, representa una amenaza para el gobierno de Javier Milei, ya que Unión por la Patria (UxP) ha votado sistemáticamente en contra de las propuestas del oficialismo libertario y del macrismo.
«Ustedes lo quieren expulsar porque se pasó de bando, si no lo estarían defendiendo», afirmó De Angeli en su intervención, señalando al kirchnerismo como responsable de impulsar la candidatura de Kueider en 2019 y de proponer su expulsión inmediata para remplazarlo. Pese a estas palabras, su voto final reflejó la postura definida por la conducción nacional del PRO, encabezada por Mauricio Macri, que priorizó mantener la banca en disputa bloqueada.
La votación dejó expuesta la tensión entre las declaraciones de principios y las decisiones estratégicas. De Angeli se unió a otros senadores del PRO, como Carmen Álvarez Rivero (Córdoba), Andrea Cristina (Chubut) y Martín Goerling Lara, quienes también respaldaron la suspensión, alineándose con los libertarios y sacrificando la posibilidad de expulsar a Kueider.
Esta maniobra buscaba proteger futuras votaciones clave para el gobierno de Milei, ya que una bancada fortalecida de UxP en el Senado podría complicar aún más la aprobación de leyes fundamentales para la agenda oficialista. La expulsión de Kueider habría significado un avance inmediato contra la corrupción, pero también un revés estratégico para el macrismo y los libertarios en términos legislativos.
El kirchnerismo ganó en la pulseada por la expulsión directa de Kueider del Senado
Finalmente, ganó el proyecto de expulsión directa de Kueider por presunto acto de corrupción y el kirchnerismo tendrá la oportunidad de remplazar al dirigente por alguien más cercano al cristinismo. Dentro de UxP creen que Kueider fue comprado por el Gobierno nacional para votar a favor de la Ley de Bases.
