Desde su acto en Tucumán donde encabezó la cena anual de la Fundación Federalismo y Libertad, el presidente Javier Milei defendió su gestión y elogió el trabajo de su ministro de Economía, Luis Caputo. En este discurso , Milei no perdió la oportunidad de resaltar la importancia de exterminar la inflación como el mejor plan social para erradicar la pobreza en el país. El mandatario fue muy claro: » un crecimiento económico basado en el equilibrio fiscal es la clave para mejorar las condiciones de vida de los argentinos».
Milei, quien asumió la presidencia con un discurso de cambio radical, aprovechó la oportunidad para responder a las críticas sobre la falta de un plan claro para el país. Enfatizó que, contrariamente a lo que sus detractores afirmaban, su gobierno había trazado un camino claro hacia el desarrollo económico.
Críticas y elogios a la política argentina
En su intervención, el presidente también hizo una crítica velada hacia la vicepresidenta Victoria Villarruel. Comentó que, a diferencia de algunos sectores de la política, su gobierno no había aumentado los sueldos de los funcionarios, como ocurrió en la Cámara de Senadores, pero sí se implementaron recortes importantes en la Cámara de Diputados bajo la gestión de Martín Menem.
A lo largo de su discurso, Milei destacó la importancia del ajuste fiscal que su gobierno implementó, asegurando que el ajuste más grande que se haya hecho en la historia de Argentina está permitiendo que la economía crezca a un ritmo anual del 17%. Para él, la política es “el arte de hacer lo imposible”, y subrayó que, al finalizar su mandato, Argentina será el “país más libre del mundo”.
Una mirada crítica a la inflación y la economía
El presidente también dedicó parte de su discurso a la cuestión económica, específicamente a la inflación. Aseguró que, si no fuera por la inflación inducida por el crawl in peg, Argentina estaría experimentando una deflación mensual del 1%. Según Milei, la inflación minorista, el indicador más visible para los ciudadanos, estuvo en 2.4%, lo que está casi en línea con la inflación mayorista.
Milei explicó que el dato de inflación estaba “contaminado” debido a las recomposición tarifaria que se ha dado en el país. Según su análisis, la inflación de bienes fue de solo 1,6%, mientras que la de servicios, afectada por los ajustes en las tarifas de los servicios públicos, subió a un 4,4%. Para el mandatario, esta diferencia se debe al desastre económico dejado por el kirchnerismo, que afectó profundamente a las empresas reguladas.
Proyecciones optimistas para el futuro
De acuerdo con Milei, si se restara la inflación inducida por el ajuste tarifario, Argentina estaría en un camino de deflación del 0,9% mensual, lo que representaría una deflación anual de 13%. Estos números, según el presidente, son un indicio de que la economía está en recuperación y en el camino hacia la estabilidad.
El mandatario cerró su intervención con un mensaje optimista sobre el futuro de la economía argentina, subrayando que las políticas implementadas en su gestión permitirán al país avanzar hacia una economía más libre y sin los lastres de la inflación crónica.