En la antesala de las elecciones legislativas del próximo año, el Gobierno de Javier Milei analiza posibles alianzas con sectores ideológicamente afines. Mientras el oficialismo debate internamente la viabilidad de acuerdos con el PRO, un sector de la Unión Cívica Radical (UCR) liderado por Rodrigo de Loredo emerge como un posible aliado estratégico para ampliar la base territorial de La Libertad Avanza (LLA).
Durante la Navidad, Martín Menem, titular de la Cámara de Diputados, extendió una invitación a los tres legisladores expulsados de la UCR: Mariano Campero (Tucumán), Martín Alfredo Arjol (Misiones) y Luis Albino Picat (Córdoba), para reunirse en la Casa Rosada. Al encuentro, además de los exradicales, asistieron De Loredo y otros 10 legisladores de su bancada. En total, 13 representantes de la UCR compartieron una extensa reunión con el Presidente.
“El Presidente fue muy generoso con nosotros, estuvimos dos horas y media dialogando sobre inquietudes distritales y proyectos de nación. Fue un encuentro extremadamente positivo que superó nuestras expectativas”, señaló De Loredo al término de la reunión.
A pesar del entusiasmo de algunos sectores, la posibilidad de una alianza genera divisiones en el oficialismo. Mientras figuras como Karina Milei y el asesor Santiago Caputo se muestran reticentes a establecer acuerdos electorales, otros ven en la UCR un aliado estratégico, especialmente en provincias donde LLA carece de estructuras sólidas.
Provincias clave y la estrategia reformista
Los «radicales con peluca», como se denomina a los legisladores de la UCR afines a Milei, poseen influencia en distritos clave. En Tucumán, Campero cuenta con una estructura consolidada; Picat y Arjol tienen presencia destacada en Córdoba y Misiones, respectivamente. Además, provincias como Mendoza, Jujuy, Chaco, Río Negro, Catamarca, Corrientes y Neuquén aparecen como escenarios donde el radicalismo podría fortalecer la presencia de LLA.
De Loredo destacó las coincidencias ideológicas en un mensaje en sus redes sociales: “Muchos serán los temas que nos encontrarán trabajando en 2025 porque coincidimos en un espíritu reformista de una Argentina que hay que descorporativizar liberando nuestras fuerzas productivas y explotando estratégicamente nuestros recursos para aumentar la riqueza y reducir la pobreza de nuestro país”.
Una nueva versión de Cambiemos
En el PRO también surgen voces que ven con buenos ojos una posible coalición con Milei y sectores de la UCR. “Estoy absolutamente de acuerdo con Milei en que tenemos que ir juntos en todos lados. Es bueno para nuestro partido, para La Libertad Avanza y para consolidar una alternativa de país”, señaló un dirigente cercano a Mauricio Macri.
Aunque aún no se definieron detalles, una eventual alianza electoral entre LLA, el PRO y la UCR podría dar lugar a una versión más libertaria de Cambiemos. Sin embargo, esta perspectiva genera tensiones dentro del oficialismo, donde algunos consideran que LLA debería competir en solitario, sin acuerdos que diluyan su identidad ideológica.
Un camino incierto
Mientras se barajan escenarios electorales y posibles coaliciones, el oficialismo y la UCR liderada por De Loredo avanzan en un acercamiento que podría redefinir el panorama político de cara a 2025. Si bien algunos sectores de LLA ven con recelo estas negociaciones, otros reconocen que alianzas estratégicas podrían fortalecer el proyecto libertario y consolidar su presencia en todo el país.
