En una medida que busca facilitar el acceso a medicamentos y optimizar su distribución, el Gobierno nacional ha decidido liberar una nueva tanda de medicamentos, lo que permite que pasen a la modalidad de “venta libre”. A partir de ahora, estos medicamentos podrán ser adquiridos directamente en farmacias sin necesidad de prescripción médica, aunque con una diferencia importante: ya no estarán sujetos a los descuentos que se otorgaban hasta ahora por la prescripción médica.
Según fuentes oficiales, esta decisión fue tomada luego de que ciertos medicamentos, anteriormente sujetos a receta, demostraran, a lo largo de los últimos cinco años, la ausencia de efectos adversos graves. En este caso, los medicamentos afectados son los que contienen Senósido A y B, un compuesto utilizado comúnmente como laxante. La medida es un paso más en el proceso de revaluación de medicamentos por parte de la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT). Este proceso comenzó en 2024 con la evaluación de productos farmacológicos se considerarían seguros para su venta sin receta médica.
Contexto y antecedentes de la medida
Esta medida de liberar más medicamentos a la venta libre forma parte de un esfuerzo más amplio del Gobierno, iniciado con la resolución 284/2024, para reducir las barreras burocráticas y facilitar el acceso a ciertos tratamientos, siempre que estos hayan demostrado ser efectivos y seguros. De hecho, la ANMAT ya había realizado movimientos similares anteriormente, liberando medicamentos para el tratamiento de diversas afecciones, como mucolíticos, cremas antialérgicas y analgésicos. En mayo de 2024, también se permitió la venta libre de algunos medicamentos conocidos como «prazoles», usados para la protección estomacal.
Ahora, los laxantes que contienen Senósido A y B, cuyo uso está destinado a tratar el estreñimiento ocasional en adultos y personas mayores de 14 años, pasarán a la modalidad de venta libre. Esto permitirá que estos productos sean accesibles sin necesidad de consultar a un profesional médico para la prescripción, siempre y cuando se utilicen de acuerdo con las indicaciones y para tratamiento a corto plazo. La medida entrará en vigencia a partir de su publicación en el Boletín Oficial, el primer día del nuevo año.
Diferencias y limitaciones en los tipos de laxantes
Cabe destacar que, mientras que los laxantes que contienen Senósido A y B podrán venderse sin receta, otros productos como los que contienen Lactulosa seguirán siendo de venta bajo receta. Esto se debe a las diferencias en la naturaleza y los riesgos de los medicamentos. La Lactulosa, que se usa principalmente para tratar el estreñimiento crónico y prevenir complicaciones hepáticas graves, requiere una supervisión más estricta, ya que puede tener efectos secundarios en tratamientos prolongados, como alteraciones en los niveles de potasio y sodio en sangre.
Impacto de la medida en la industria farmacéutica
Esta iniciativa también tiene un impacto significativo en la industria farmacéutica. Según datos de la Cámara de Medicamentos de Venta Libre, actualmente la mayoría de las ventas en las farmacias corresponden a medicamentos bajo receta, representando el 90% de la facturación, mientras que solo el 10% corresponde a productos de venta libre. Sin embargo, el cambio en la normativa podría alterar esta relación, con un aumento gradual de la venta de medicamentos sin receta.
La liberación de más productos a la venta libre también podría impulsar la competencia en el sector, permitiendo a los consumidores acceder a una mayor variedad de tratamientos de manera más directa y a precios más accesibles. Aunque la medida de Javier Milei no incluirá descuentos adicionales en farmacias, al menos permitirá un acceso más rápido a ciertos medicamentos, mejorando la disponibilidad para quienes los necesiten.
