Catamarca.- (Por Juan Carlos Andrada).- Migue Granados entrevistó a Flor Sosa, la multimillonaria nacida en Catamarca. Desde lo periodístico y mediático, la nota fue definida por el propio conductor de La Cruda como “pochoclera, amarillita o de paja de guita”. Pero tanto las respuestas meramente estéticas de la empresaria como las preguntas hedonistas del actor y humorista rosarino, contienen una controvertida y lúgubre lección política.
Una caricatura de sí misma para Flor Sosa
La misma se apoya en el objetivo extremo de tener que matar simbólicamente al padre fundador de la empresa que ató a la heredera al poder destructivo del pasado. Esto explica el sentimiento ambivalente de la hija: el deseo de tenerlo con vida a su papá y la necesidad de asesinarlo una y otra vez, en la creencia de que es la única forma de alcanzar la cumbre del poder, dejando atrás definitivamente los triunfos efímeros, y en una suerte de caricatura de sí misma de la pretendida celebridad.
Ya hablaremos de la estructura de la nota, pero antes dejamos algunas frases sueltas que cruzaron la entrevista de Migue Granados: “La culpa forma parte del vocabulario del millonario”, “Nunca es suficiente, nunca es Flor”, “Cuando sos de una provincia chica como Catamarca, sos nadie”, “Cuando tenes mucho dinero, ya no se lo cuenta, se lo pesa”, “Cuando te aburris de la guita, querés poder”. Todas estas expresiones confesadas bajo “tratamiento” (psicólogo, psiquiatra, coach, etc., etc.).
El increíble contraste con Don Emilio
No solo que Flor Sosa no pudo escapar de la enorme sombra de Don Emilio Sosa, que murió en 2018. Sino que ni siquiera viajando mucho y por todo el mundo la influencer logró al menos “distancia”. El ayer triunfa sobre el presente. El teléfono fijo le gana a las redes sociales. El tipo era pobre, no tenía estudios e inventó el concepto del “médico en casa” -proyectos prósperos casi siempre vinculados a la caja del Estado o los empleados públicos-. Ella, por el contrario, es rica por heredar la “gallinita de los huevos de oro”: se formó en las mejores universidades del mundo y estudió con Hillary Clinton, pero sigue sin brillar con luz propia. Increíble contraste.
La temática es imperdible. Primero, la pesada herencia; después, nadie sabe dónde queda Catamarca. A eso le sigue la impotencia de la «muerte física de mi padre». Asimismo, la idea de «tengo mucho dinero, tanto que no sé cuánto», y al mismo tiempo, «la gente prejuzga, no funciona así». A su vez, un clásico: «dinero no es lo mismo que Poder», a lo que se puede añadir una marca de época: chongos y sexo en sitios solo para millonarios. Imposible soslayar la formación en Estados Unidos y la mística que rodea a los ricos, con el lujo como exclusividad y experiencias. No se puede dejar de lado tampoco la victimización: «Tuve que salir a bancar la parada por ser mujer, del interior y joven». Y como cierre, los mambos mentales, por los que en algún momento hay que “volver”.
¿Por qué no puede dejarlo atrás para crear un orden nuevo y además auténtico? Porque le erraron al concepto pero también al estilo y al simbolismo. Así, nunca lo va a superar al papá. Creo que hasta la nota con Migue Granados la pidió Flor, porque al conductor se le escapó en el streaming “yo no te conocía”, y lanzó elogios como “ya nos dimos cuenta que no sos una boluda”. Para luego pasar a hablar de lujos con la tarjeta infinita y lujuria con chicos lindos de Beverly Hills que reforzarán seguramente su perfil de “emprendedora”. A propósito, “Raya” es una aplicación de citas exclusiva para celebridades, influencers y personas con notoriedad.
Tener todo y no tener nada
Cuesta creer la ignorancia de los porteños que no saben dónde queda Catamarca, contenido básico en la Escuela Primaria. Revistas internacionales hablan de las “bellezas” de Antofagasta de la Sierra como de “otro planeta”. Tampoco Flor se acordó que la Virgen del Valle mueve multitudes. El hueco no se puede rellenar porque falta gratitud. ¿No probaste siendo agradecida? Por eso da la impresión de tener todo y no tener nada. Más grave que fallarse a uno mismo es fallarle a tu papá, a tu barrio, a tus amigos, a tu provincia, a tu patria chica, a tu Iglesia.
“Daria lo que fuera porque esté vivo”, sostuvo la joven empresaria. Pero lo cierto es que Don Emilio no murió o mejor dicho siempre vuelve, a pesar que le tiraron a matar durante toda la nota. Él, fumanchero. Ella, desagradecida. Era previsible. Por suerte, desde el “más allá” este hombre simple que supo aprovechar las oportunidades y las relaciones con el poder político que le brindó Catamarca, les recordó a este par de delirantes que no hay atajos para la grandeza.
Migue Granados, la Harley y la ostentación en plena crisis
Dos cosas para finalizar pero vinculadas. Primero, la incomodidad de ostentar en medio de la crisis económica y la pobreza, el hambre y la miseria, la falta de salud y trabajo en el país. Y seguido a esto, para rematar este teatro, la piba le regaló una moto Harley Davidson al humorista, y eso que Migue Granados ya le había advertido que Florencia Sosa no era Ricardo Fort. Pero qué oportuno fue que juntos mencionaran en la entrevista a “los buscas” y los aprovechadores.
¡Qué casualidad! En esto estoy de acuerdo, realmente fue una nota “desopilante”.
Mirá el video de la entrevista completa de la frívola entrevista a Flor Sosa
