La primera semana dentro de la casa de Gran Hermano 2025 está más candente que nunca. En este sentido, los participantes jugaron el primer desafío, que derivó en el triunfo de Santiago Algorta. Puntualmente, el líder recibió el beneficio de restringirle la nominación a 4 compañeros y eligió a: Petrona, Jenifer, Sandra y Delfina.
Posteriormente, el primer líder de Gran Hermano 2025 justificó su elección dentro de la casa. En este aspecto expresó sobre Petrona: «De a poco voy cómo se arma la gente con la que conecto y siento que vamos a tener una linda experiencia o hace ruido. Capaz pienso que esas personas pueden nominar a la gente que ya quiero en pocas horas».
Por otro lado, el uruguayo aseguró que al llevar poco tiempo en Gran Hermano 2025, la posibilidad de nominar puede confundirlas. Además, manifestó: «Siento que la nominación es ya, estamos hace 24 horas y parece que es una semana. No hay un manual y nos mandamos cag… ya. Necesitamos más tiempo y le puede venir bien pensar más».
«Me cansé»: Una participante de Gran Hermano 2025 dejó a todos boquiabiertos, contando la conflictiva relación que tuvo con un futbolista
Jenifer Lauría es una de las flamantes participantes de Gran Hermano 2025. En este sentido, muchos usuarios de internet la recordaron por su relación con Ricardo Centurión, actual futbolista de Vélez Sarsfield. Sin embargo, fue la misma Jenifer, quien se encargó de contar el calvario que atravesó mientras estaba en pareja con el mediocampista.
Posteriormente, Jenifer contó en Gran Hermano 2025 que sufrió todo tipo de situación con el futbolista. En este aspecto, expresó: «La realidad es que me cansé de que me meta los cuernos. Estaba muy enamorada de él y vivíamos juntos. Quedé embarazada y después arrancaron los problemas. Su familia me tenía bronca y me hacían cosas malas, fue un embarazo heavy, me decían que era una negra que me sacaron del pozo».
Finalmente, la participante de Gran Hermano 2025 se ocupa en soledad de la crianza de su hija. Además, manifestó: «Nunca dejé de laburar estando con él a pesar de que me lo pedía. Hoy vivo gracias a mí porque él se quedó sin nada. No me pasa cuotas ni nada porque está con un montón de quilombos. No le desearía ni a mi peor enemigo lo que yo pasé».
