El enfrentamiento entre Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta ha marcado un capítulo importante en la política porteña, sobre todo por la reciente polémica en torno a la falta de cárceles en la Ciudad y una nueva fuga de presos. Ambos dirigentes se responsabilizan mutuamente por la escasez de espacios adecuados para el alojamiento de detenidos, un tema que ha desatado el primer gran conflicto político del verano.
El último estudio sobre la preocupación de los porteños revela que el 48,9% de los encuestados mencionó la «inseguridad/delincuencia» como su principal inquietud. Este dato pone de manifiesto la relevancia del tema en la agenda de la Ciudad y la presión que enfrenta la ministra de Seguridad para evitar que el escándalo de la fuga de presos la afecte políticamente. La fuga de detenidos ha puesto sobre la mesa la responsabilidad de las autoridades en la gestión de la seguridad y las condiciones en los centros penitenciarios de la Ciudad.
Escenario electoral: una batalla decisiva para 2025
De cara a las elecciones de 2025, la Ciudad de Buenos Aires se perfila como el escenario más crucial, con un escenario electoral aún abierto y muy competitivo. En este contexto, el PRO, que ha gobernado la Ciudad desde su fundación, se enfrenta a una presión creciente por mantener su liderazgo en el distrito, sobre todo tras la irrupción de figuras libertarias y la competencia interna que se desata dentro del partido.
Las encuestas muestran que, en las elecciones para la Cámara Alta, Mauricio Macri lidera con un 27,9%, seguido de Manuel Adorni (24,1%) y Leandro Santoro (23,3%), lo que confirma la fuerte competencia entre el oficialismo y los libertarios. En paralelo, figuras como Bullrich y Larreta continúan siendo nombres relevantes para el futuro de la Ciudad, aunque su disputa interna complica las expectativas del PRO para consolidar su victoria.
Imágenes contrapuestas: Bullrich y Larreta
Un aspecto clave en este conflicto es la diferencia en la imagen pública de Bullrich y Larreta, reflejada en las encuestas recientes. La ministra de Seguridad mantiene una imagen relativamente favorable, con un 49% de opiniones positivas, aunque con una alta proporción de opiniones negativas, que llega al 50%. Esto refleja las tensiones internas del PRO, donde Bullrich se presenta como una figura fuerte pero polarizante.
En contraste, Larreta se encuentra entre los políticos con peor imagen, con solo un 29% de opiniones positivas frente a un 68% de opiniones negativas. Este notable desequilibrio en la percepción pública coloca a Larreta en una posición más complicada para enfrentar la interna del PRO y para liderar en un escenario electoral tan competitivo.
La interna en el PRO: ¿predominará el diálogo o la confrontación?
La lucha interna en el PRO sigue siendo una de las mayores preocupaciones de los referentes del partido, sobre todo con las tensiones crecientes entre los sectores dialoguistas y los más radicalizados. En este escenario, figuras como Bullrich y Larreta seguirán disputando el liderazgo, mientras que la postura del presidente Javier Milei, con un fuerte apoyo popular, sigue influyendo en el debate sobre la reconfiguración del poder político en la Ciudad y en el país.