La vicepresidenta y titular del Senado de la Nación, Victoria Villarruel, habló este jueves luego de la sesión en la que se aprobó la expulsión del legislador Edgardo Kueider, en medio del escándalo por su detención en Paraguay con US$ 200.000 no declarados. Si bien Villarruel destacó el accionar del cuerpo con ese tema, lamentó la “protección” del senador ultrakirchnerista Oscar Parrilli, al no aprobarse el tratamiento para también expulsarlo.
“Hoy el Senado reaccionó velozmente ante un hecho de corrupción”, celebró Villarruel en un mensaje publicado en su cuenta de X. No obstante, admitió que “lamentablemente tuvo un altísimo costo al permitir que ingrese una senadora de La Cámpora lo que fortalece al bloque kirchnerista”. En esta línea, puntualizó: “Vamos a trabajar hasta el último suspiro para que los K no manejen más los designios de nuestro país”.
Junto con ello, la titular de la Cámara alta compartió una declaración a medios acreditados, entre los cuales estaba El Intransigente, tras la sesión, en la que manifestó: “En el día de hoy el Senado de la Nación favoreció la discusión sobre el tratamiento judicial de un senador que está acusado de hechos inmorales. Y en una decisión que han tomado los senadores se votó expulsarlo del cuerpo. Por lo cual, en un tiempo récord ha sido expulsado de la Cámara por decisión de los senadores”.
“Asimismo, solicité que se incluyera en el orden del día el tratamiento para la expulsión también del senador Parrilli, que está procesado por encubrimiento agravado por el asesinato de 85 argentinos en el atentado a la AMIA, pero desgraciadamente los senadores consideraron que a esta persona hay que protegerla y que continúe en su banca”, puntualizó la vicepresidenta de la Nación.
Seguidamente, manifestó: “Y aquí nos encontramos con una de las tantas hipocresías del kirchnerismo, por las cuales mientras el senador no sea de ellos o la banca le sirva a ellos, los senadores del kirchnerismo votan siguiendo la destitución y la expulsión de un senador. Ahora, cuando se habla de ellos y de hechos tan graves como los que está procesado, directamente esto no se trata”.
Sobre el final, Villarruel puso a votación el pedido del bloque libertario para discutir la suspensión del senador peronista Oscar Parrilli (Neuquén) por estar procesado en la causa conocida como Memorándum con Irán. No obstante, resultó rechazado por no alcanzar los dos tercios necesarios: cosechó 34 adhesiones afirmativas, 31 rechazos y una abstención.
Finalmente, Villarruel, en un claro mensaje al cuerpo de senadores, anunció públicamente: “Asimismo, solicité que se tratara el congelamiento de las dietas de los senadores porque a partir del 1 de enero se comienzan a actualizar automáticamente, cuestión que espero que los senadores traten”, apeló, tras lo cual aclaró: “Yo no soy senadora, sólo facilito las condiciones para el tratamiento y la discusión de este tema, pero no soy la que toma las decisiones”.
“Por lo cual, entendiendo también el esfuerzo que está haciendo la población, un esfuerzo inmenso desde lo económico, creo que debemos estar a la altura y por eso deben estar congeladas las dietas de los senadores”, sentenció una Villarruel rodeada por más de 10 periodistas acreditados en el Congreso de la Nación.