El régimen de Nicolás Maduro ha puesto precio a la captura de uno de los principales líderes opositores del país sureño. La Fiscalía venezolana ofrece recompensa por Edmundo González Urrutia de USD 100.000 para quien aporte información sobre su paradero, intensificando la persecución política a pocos días de la investidura presidencial del 10 de enero.
González Urrutia enfrenta múltiples acusaciones del régimen chavista, incluyendo conspiración, usurpación de funciones, desconocimiento de las instituciones del Estado y asociación para delinquir. El Ministerio Público ha instado a la población a colaborar con la búsqueda, desplegando su campaña en aeropuertos y puntos de control en todo el país.
Las elecciones, el exilio y una lucha que no se detiene
El opositor, respaldado por la Plataforma Unitaria Democrática, fue señalado como el verdadero ganador de las elecciones del 28 de julio, según actas que esta organización presentó. Sin embargo, el Consejo Nacional Electoral, controlado por el chavismo, proclamó fraudulentamente la victoria de Maduro.
Desde entonces, González Urrutia, junto a María Corina Machado, lideró protestas y acciones destinadas a defender la voluntad popular. Estas iniciativas provocaron una intensificación de la persecución en su contra, con la emisión de una orden de captura el 2 de septiembre por delitos como sabotaje y forjamiento de documentos públicos.
España, el refugio forzado del líder opositor
Ante el hostigamiento constante, González Urrutia abandonó Venezuela y solicitó asilo en España, desde donde ha continuado su lucha. Sin embargo, el fiscal general Tarek William Saab ha argumentado que, al aceptar el asilo, el líder opositor pierde la capacidad legal de regresar al país sin consecuencias penales.
“El asilo implica permanecer en España. González no puede retornar porque violaría ese estatus y enfrenta una investigación penal en Venezuela”, declaró Saab recientemente, mientras enfatizaba la supuesta legalidad de las medidas contra el opositor.
Un retorno anunciado en medio de tensiones
A pesar de que Maduro ofrece recompensa por Edmundo González Urrutia, el opositor ha reafirmado su compromiso de regresar a Caracas el próximo 10 de enero, fecha establecida por la Constitución para asumir la presidencia como ganador legítimo de los comicios. “Es nuestro deber hacer valer la voluntad popular en 2025”, declaró a sus seguidores, instando a la movilización ciudadana.
La comunidad internacional, incluyendo organismos de derechos humanos, ha condenado la persecución contra el líder opositor, calificando las acusaciones como intentos por silenciarlo. Asimismo, se ha exigido al régimen de Maduro que cese las detenciones arbitrarias y respete los derechos políticos de los ciudadanos venezolanos.
Con el panorama político tenso y una fecha clave en el horizonte, el futuro de Venezuela está más incierto que nunca. El destino de González Urrutia será un indicador decisivo del curso que tomará el país en los próximos meses.
