El caso del deceso de bebés en Córdoba sacudió la provincia en 2022. Sin embargo, los juicios recién han comenzado esta semana. El Ministerio de Justicia provincial ha dispuesto que las audiencias cuenten con la presencia del público general. Desde la Cámara de Séptima del Crimen, hasta el 30 de junio, se realizarán las 78 audiencias que conformarán el juicio.
Según se informó en el Boletín del Ministerio, para el juicio histórico «se habilitarán cuatro salas “espejo”, destinadas a la prensa, a representantes de instituciones acreditadas y al público en general, con pantallas y equipos de sonido que transmitirán de manera sincrónica el desarrollo de las audiencias».
En el día de la primera audiencia, llevada a cabo el 6 de enero, la principal acusada, Brenda Agüero, se indispuso y no pudo declarar. En la segunda audiencia, la enfermera obstétrica que ha sido la principal señalada respondió preguntas en torno a su formación y sus labores.
Además, prestaron declaración parte de los 11 imputados. Entre ellos se encuentran: Liliana Asís, exdirectora del Hospital, Marta Gómez Flores, exjefa de Neonatología; Adriana Moralez, encargada del comité de seguridad del paciente, María Alejandra Luján, quien firmó uno de los certificados de defunción sin causa definida; Alejandro Escudero Salama, Pablo Carvajal, miembros de la Secretaría de Salud. Brenda Agüero y Daniel Cardozo, exMinistro de Salud y director del COE.
Brenda Agüero es quien recibió la mayoría de las críticas y la principal acusada del caso. Esto se debe a que es quien estaba a cargo del cuidado de los neonatos. “Asesina serial de bebés”, la calificó en su alocución de presentación del caso Mercedes Balestrini, fiscal adjunta en la acusación.
La declaración de la querella y una fuerte denuncia contra el Hospital
Durante la audiencia, Damaris Bustamante, madre de Benjamín, uno de los bebés fallecidos, relató cómo sufrió violencia obstétrica en el hospital. Su hijo, tras un parto aparentemente sin complicaciones, fue llevado a UTI tras un paro cardíaco. Aunque ella no recibió explicaciones claras.
Según Bustamante, fue maltratada por la enfermera Brenda Agüero. Cuando intentó presentar denuncias contra el hospital, las autoridades le permitieron hacerlo. Pero, en medio de su sufrimiento, se enteró de que su hijo ni siquiera estaba registrado.
Pasado el mediodía, en su declaración, Bustamante señaló que regresó al Hospital Neonatal en busca de explicaciones y para denunciar la violencia obstétrica que habían sufrido. Según relataron, Escudero Salama, exsubdirector del hospital, les solicitó que presentaran una denuncia por escrito.
«Escudero Salama me pidió una denuncia escrita. Asís nos pidió que no elevemos una denuncia a la Policía», declaró. Contó que, tras el parto, Brenda Agüero se acercó, miró al bebé y se retiró. Luego, mientras ella estaba en la sala de recuperación, Benjamín fue llevado para ser revisado. Media hora después le devolvieron al niño para que pudiera sostenerlo y darle el pecho.
«Entró Brenda a la sala, se paró al lado de la cuna y me dijo: ‘Es hermoso’. Luego agregó que estaba incómodo y, aunque le dije que estaba tranquilo, ella lo colocó de costado», explicó Bustamante. Más tarde, le informaron que el bebé debía ser llevado nuevamente para una revisión porque «no lo veían bien».
«Yo confié, me dije: ellas son las que saben», relató. Sin embargo, poco después le comunicaron que Benjamín había sufrido un paro cardíaco y que estaba en terapia intensiva. En estado de shock, Damaris ese día se desmayó. Al recuperarse se enteró de que su hijo (Benjamín Luna) no estaba siquiera registrado en el hospital. «Una neonatóloga vino y me dijo que mi hijo estaba muy mal y que yo estaba ‘abrumada’ por la situación», concluyó.
Sin embargo, las palabras de Damaris se retrotrajeron al día del nacimiento de Benjamín. En la sala de preparto la mujer había estado en contacto con Brenda Agüero. «La vi, se levantó el barbijo, se dio vuelta y me miró, y le preguntó a otra: ‘¿Qué le pasa a esta?’. Ahí comenzó su maltrato», expresó Bustamante.
Agüero, según la denunciante, la agarró del brazo con fuerza y le ordenó levantarse, advirtiendo que si su hijo nacía y se caía, podía morir. «Si tu hijo se muere, será tu culpa». «Tuve que volver a mi casa con los brazos marcados por ella y sin mi hijo», concluyó Bustamante.
Damaris, madre de Benjamín, fallecido el 23 de abril de 2022, señaló haber sufrido violencia obstétrica y acusó directamente a Agüero como responsable. En Argentina existe la Ley 25.929, sancionada y promulgada en 2004.
Esta ley, finalmente reglamentada en 2015, defiende los derechos de las personas gestantes a dar a luz en un espacio cómodo, respetuoso e higiénico. Su incumplimiento prevé una penalización para el centro y los representantes de la salud que obstruyan un parto respetuoso.