El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires instó a la empresa distribuidora de electricidad Edesur y al Ente Nacional Regulador de la Electricidad (ENRE) a tomar medidas urgentes para restablecer el servicio eléctrico, que al viernes afectaba a más de 19.000 vecinos de la capital. En una carta firmada por Nicolás Zaballa, titular de la Subsecretaría de Inversiones del Ministerio de Desarrollo Económico, la administración porteña calificó la situación como «insostenible», resaltando que los cortes de luz perjudican a más de 30.000 habitantes desde el miércoles.
El documento enviado con carácter de urgencia subrayó que el servicio eléctrico es esencial para la vida cotidiana y enumeró las consecuencias negativas de su interrupción, desde problemas sanitarios y económicos hasta riesgos patrimoniales. Además, el texto incluyó una advertencia de posibles acciones legales y administrativas si no se logra restablecer el suministro de manera inmediata.
Impacto en la vida cotidiana
La falta de electricidad ha afectado especialmente a los adultos mayores y a las personas electrodependientes, quienes necesitan equipos médicos que funcionan con energía eléctrica de manera constante. Este contexto, agravado por las altas temperaturas, pone de manifiesto la importancia del suministro eléctrico como un derecho básico y necesario para garantizar la calidad de vida de los porteños y el funcionamiento de comercios y servicios esenciales.
Las autoridades de la Ciudad calificaron la situación como crítica e instaron a Edesur y al ENRE a implementar mecanismos inmediatos que garanticen «la efectiva prestación del servicio y su calidad». Según Zaballa, la frustración entre los vecinos crece cada día que pasa sin electricidad, agravando las dificultades de la población afectada.
El Gobierno porteño dejó claro que la persistencia de los cortes podría derivar en sanciones legales y administrativas. “Todo ello, bajo apercibimiento de iniciar las acciones administrativas y judiciales pertinentes”, concluye la misiva. Esta advertencia refleja la postura firme de la administración de la Ciudad ante las constantes interrupciones del servicio.
Un problema recurrente en el AMBA
Los cortes de luz en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se han intensificado durante los meses de verano. En diciembre pasado, más de 45.000 usuarios sufrieron interrupciones masivas del servicio, lo que provocó protestas en diversas zonas de la ciudad y el conurbano bonaerense. Estas fallas afectan no solo a los hogares, sino también a sectores clave como el comercio, que enfrenta pérdidas económicas, y a familias con pacientes electrodependientes, donde la falta de energía representa un riesgo para la vida.
Desde el Gobierno de la Ciudad, se enfatizó la necesidad de que las empresas responsables del suministro eléctrico y los organismos de regulación, como el ENRE, prioricen estas situaciones para evitar que las interrupciones sigan perjudicando a miles de usuarios.
Reacción de los vecinos
La falta de respuestas claras por parte de Edesur ha generado indignación en los barrios más afectados, como Flores, Caballito y Villa Lugano. Los vecinos denunciaron que, además de la falta de electricidad, muchos enfrentan problemas con el suministro de agua corriente, ya que dependen de bombas eléctricas para garantizar su distribución.
En las redes sociales y en protestas organizadas, los habitantes expresaron su malestar ante la situación y exigieron soluciones concretas y a largo plazo para prevenir nuevos cortes.
Pedidos del Gobierno de la Ciudad
En su carta, el Gobierno porteño exigió que el servicio eléctrico sea restaurado «en condiciones normales» y de manera urgente, para garantizar que los vecinos puedan disfrutar de un suministro estable. También se instó a Edesur y al ENRE a realizar las reparaciones necesarias con celeridad, evitando que los problemas persistan en los próximos días.
La carta concluyó recordando que el acceso a la electricidad no es un lujo, sino un servicio esencial e indispensable para el desarrollo de la vida cotidiana, y reiteró el compromiso de la Ciudad con la defensa de los derechos de sus vecinos.
