El Parlamento de Chile aprobó la reforma de pensiones impulsada por el presidente Gabriel Boric, que introduce cambios estructurales en el sistema de jubilaciones vigente desde la dictadura de Augusto Pinochet. La medida busca mejorar los montos percibidos por los jubilados a través de un aumento de la cotización y la creación de un seguro social.
Esta reforma al sistema previsional es un logro histórico para Chile y un acto de justicia, respeto y profundo cariño por nuestra gente, que significará el mayor aumento en las pensiones desde su creación, con foco especial en el reconocimiento de tantas mujeres que han debido… pic.twitter.com/bDvygWKrpI
— Gabriel Boric Font (@GabrielBoric) January 30, 2025
La propuesta, que enfrentó intensos debates desde su presentación en noviembre de 2022, logró respaldo en la Cámara de Diputados con votos del oficialismo, la Democracia Cristiana y sectores de la coalición opositora Chile Vamos. Con esta aprobación, el gobierno de Boric concreta la mayor transformación del sistema previsional en cuatro décadas.
Principales cambios en el sistema previsional
El nuevo esquema eleva la cotización del 10% al 17%, un incremento que será financiado por los empleadores de manera progresiva. Además, establece la pensión básica universal, que pasa de 214.000 a 250.000 pesos chilenos (aproximadamente 253 dólares). Se estima que la reforma beneficiará a 2,8 millones de jubilados, con aumentos en sus ingresos de entre un 14% y un 35%.
Otro aspecto clave es la creación de un seguro social, que incorpora mecanismos de solidaridad intra e intergeneracional. Sin embargo, la reforma no elimina las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), como pretendía inicialmente el Gobierno, aunque sí refuerza su regulación para garantizar mayor transparencia y equidad.
Un cambio histórico para Chile
Tras la aprobación, la ministra de Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara, destacó la importancia de la reforma: “Se ha dado un paso fundamental para cambiar el modelo que impuso la dictadura. Avanzamos hacia un sistema con principios de solidaridad y protección social”.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, subrayó que la medida marca un punto de inflexión: “No será la última reforma previsional, pero representa un avance significativo para mejorar la calidad de vida de los chilenos”.
El debate sobre el sistema previsional ha sido una constante en la política chilena. Con esta reforma, el gobierno de Gabriel Boric busca equilibrar el modelo de capitalización individual con elementos de protección colectiva, asegurando mejoras para los jubilados sin desmantelar el esquema actual.
Desafíos y próximos pasos
Si bien la reforma supone un avance, su implementación requerirá ajustes y monitoreo constante. Expertos advierten que será clave garantizar que el nuevo esquema sea sostenible a largo plazo y que las mejoras en las pensiones sean efectivas para toda la población. La discusión previsional seguirá abierta en los próximos años, a medida que Chile continúe ajustando su sistema de seguridad social.