El petróleo sube , su precio marcó un hito al alcanzar niveles que no se veían desde octubre, impulsado por una reducción sostenida de los inventarios en Estados Unidos. Este fenómeno genera inquietud en Argentina, donde las subas internacionales podrían trasladarse al precio de los combustibles locales.
El barril de Brent, referencia clave para Europa y Argentina, subió un 1,8% situándose en 76 dólares. Mientras tanto, el crudo intermedio de Texas (WTI), indicador principal en Estados Unidos, también presentó un incremento del 2,1%, llegando a 73,19 dólares por barril. Ambos casos reflejan un alza sostenida durante seis semanas consecutivas.
Estas subas, además de los informes que señalan descensos en los inventarios de crudo en Estados Unidos, tienen su base en el optimismo por el crecimiento económico de China. Con la reapertura del gigante asiático, principal importador de petróleo, se espera una mayor demanda de energía, especialmente de diésel, que ya experimenta incrementos notables.
Impacto en Argentina: ¿subirán los combustibles?
El mercado local sigue de cerca esta tendencia. De mantenerse la suba del Brent, las petroleras en Argentina podrían ajustar los valores en los surtidores. A partir del 2 de enero, ya se observó un incremento del 1,75% en los precios de la nafta y el gasoil, anunciado inicialmente por YPF y seguido por otras empresas como Shell y Axion.
Este ajuste está vinculado no solo a las variaciones internacionales, sino también al reciente aumento del Impuesto sobre los Combustibles Líquidos y el Impuesto al Dióxido de Carbono, aprobado mediante decreto por el Gobierno de Javier Milei. Aunque estos gravámenes no se trasladan inmediatamente al consumidor, sí inciden en la estructura de costos del sector.
El futuro del petróleo en la economía argentina
El pretróleo sube y el contexto es favorecedor. El Brent ha acumulado un incremento de más del 7% desde principios de diciembre, cuando su precio rondaba los 70,92 dólares por barril. Esta tendencia genera preocupación sobre la capacidad del mercado local para absorber nuevas alzas, especialmente tras dos años consecutivos de caída en los precios del petróleo a nivel global.
A pesar de la volatilidad, analistas internacionales consideran que los fundamentos del mercado apuntan a una estabilización moderada, siempre que el crecimiento chino y la recuperación de inventarios no superen las expectativas actuales.
En un contexto de precios en aumento, la combinación de factores globales y locales deja abierta la pregunta: ¿cómo afectará esta suba a la economía doméstica y a los bolsillos de los consumidores argentinos?
