En su discurso inaugural como 47° presidente de los Estados Unidos, Donald Trump reiteró una polémica promesa: recuperar el control del Canal de Panamá. Trump acusó a China de operar la estratégica vía y afirmó que los barcos estadounidenses están siendo «excesivamente sobrearancelados». «Vamos a recuperarlo», declaró, generando aplausos entre sus seguidores.
Estas palabras provocaron una inmediata respuesta por parte del presidente de Panamá, José Raúl Mulino, quien rechazó categóricamente las declaraciones del mandatario estadounidense.
La respuesta de Panamá: defensa de la soberanía
Horas después de las declaraciones de Trump, el presidente panameño, emitió un contundente comunicado rechazando sus palabras. «El Canal es y seguirá siendo de Panamá, y su administración estará bajo control panameño con respeto a su neutralidad permanente», expresó Mulino.
El Canal de Panamá es clave para el comercio global, conectando los océanos Pacífico y Atlántico. Actualmente, maneja el 5% del comercio marítimo mundial, siendo Estados Unidos y China sus principales usuarios.
El mandatario recordó que el control del Canal no fue una «concesión», sino el resultado de «luchas generacionales» que culminaron con el tratado Torrijos-Carter. Desde 1999, Panamá ha administrado y expandido el Canal con responsabilidad, sirviendo al comercio global, incluyendo a Estados Unidos. «No hay presencia de ninguna nación del mundo que interfiera con nuestra administración», subrayó.
Mulino cerró su comunicado apelando al diálogo como la vía para resolver cualquier controversia, destacando la historia de cooperación entre ambos países. «Ejerceremos el derecho que nos ampara y la fortaleza que nos da el Derecho Internacional para manejar las relaciones entre países aliados y amigos», afirmó.
El reclamo de Trump: recuperar el Canal
Durante su discurso, Trump criticó el acuerdo firmado en 1977 entre el entonces presidente estadounidense Jimmy Carter y el líder panameño Omar Torrijos, que resultó en la transferencia del Canal a Panamá en 1999. «China está operando el Canal de Panamá y nosotros no se lo dimos a China. Se lo dimos a Panamá, y lo vamos a recuperar», afirmó Trump.
Además, señaló que el propósito y el espíritu del tratado Torrijos-Carter han sido «violados» y acusó a Panamá de tratar injustamente a los barcos estadounidenses. Incluso dejó entrever la posibilidad de usar la fuerza militar para retomar el control del Canal, construido por Estados Unidos e inaugurado en 1914.
Las declaraciones de Trump abrieron un nuevo frente en su relación con Panamá y generan incertidumbre sobre el futuro del tratado Torrijos-Carter. A medida que el Canal de Panamá sigue siendo un pilar clave para el comercio mundial, este conflicto podría tener repercusiones internacionales en los próximos meses.