Realmente fuerte fue lo que se escuchó en Intrusos, el programa que lleva adelante Marcela Tauro a través de la pantalla de América TV. Allí, se escuchó una sentida entrevista que Nazarena Vélez brindó y donde habló de uno de los peores momentos de su vida.
Esto tiene que ver con lo que atravesó con la muerte de su hermana y de su esposo, Fabián Rodríguez, como así también en torno a sus peleas con Daniel Agostini, padre de su hijo Gonzalo. «Llegó un momento de mi vida donde estaba muy oscura, con mucho dolor, mucha angustia», comenzó diciendo en torno a Santiago Caamaño, su pareja.
«Estaba destrozada, destrozada en todos los aspectos. Cuando pasó lo de Fabián yo quedé rota, pero quedé rota de verdad. Yo venía de la muerte de mi hermana Jazmín, lo de Fabián, la manera en la que fue», expresó Nazarena Vélez sin guardarse absolutamente nada.
«Después quedarme en la calle con deudas, era como un montón. Entonces ahí, como pude, me fui poniendo de pie. Cuando empecé a querer reinsertarme en la vida empecé a ver todo lo positivo y a tratar de quererme. Esta obra que estamos haciendo, Suspendan la boda, se trata de una pareja que se va a encontrar con su yo de dentro de 20 años», apuntó.
Inmediatamente, Nazarena Vélez decidió ir por más. «Después de la obra, nosotros le preguntamos a la gente que le diría a su yo del pasado o del futuro. Yo me daría un abrazo tan grande, me diría ‘hiciste lo que pudiste y estuviste bien’. Con tres pibes, fue difícil», disparó.
«Me miro con mucho cariño. A la distancia me entiendo, me da bronca, pero también me entiendo. Uno hace lo que puede, cuando sentís que te están basureando… el Chyno de muy chiquitito presenció cómo yo le rompí el auto a Daniel, un horror. Un acto de violencia… pero hacía tres meses que no lo podía ver. Lo sentía como un secuestro. Hice lo que pude», sentenció Nazarena Vélez.
