No hay dudas de que Denise Dumas es una de las figuras más destacadas del mundo del espectáculo, y es que se trata de uno de los personajes más queridos por el público. Es por su calidez y transparencia que la gente la elige y la sigue todos los días en el programa de espectáculos que conduce para la TV Pública.
Fue allí que Denise Dumas rompió en lágrimas tras filtrarse que Vanina Escudero y Álvaro Navia le habían sacado el madrinazgo de su hija. A poco de dicho escándalo, quien salió en defensa de la conductora fue Fede Bal, que se presentó en Intrusos, el ciclo conducido por Marcela Tauro para América TV, para hablar de su carrera y de su vida amorosa.
Junto con Denise Dumas Fede Bal co-protagoniza la obra Somos Nosotros, razón por la que sintió la necesidad de apoyarla en este duro momento. Consultado por Marcela Tauro sobre el conflicto que atravesó su colega hace unas semanas, el actor respondió: “Está bien, yo creo que lo le llega demasiado esto, creo que pasa más en privado ese tema de su madrinazgo”.
“Denise es una mujer mega encantadora y creo que esto le afectó porque no se mete en conflictos y es una mina tan buena, la estoy conociendo ahora y a Campi que lo admiro tanto. Ella no se siente cómoda cuando ustedes le preguntan esto, no estoy pidiendo que no lo hagan. Hay niños en el medio y uno después crece y todo queda en YouTube”, manifestó.
El descargo de Denise Dumas
En su programa Nuevas tardes, Denise Dumas no pudo contener las lágrimas y conmovió a sus televidentes al dar a conocer su lado de la historia sobre lo que sucedió con Vanina Escudero. «Hace bastante que no la veo a Vanina Escudero. Hace tiempo que no hablamos, estamos como distanciadas», dijo sobre quien solía ser su íntima amiga.
«Cuando pasó lo de la pandemia ellos se fueron a Uruguay… Son decisiones, estaban viviendo allá. No se podía viajar. Cada uno elige lo que cree que es mejor para su hijo. Entiendo la decisión, cada uno elige lo que quiere, yo me hubiera manejado distinto. Obviamente es un dolor enorme», continuó Denise Dumas.
«Es un dolor muy grande para mí. Quedó una relación bien, pero con distancia. Estamos distanciadas. Éramos bastante cercanas. Cuando me avisó que se iba a bautizar era al otro día, y yo ya no era la madrina. Me avisó, nos merecíamos esa charla para por lo menos no ver la foto. Yo aprendí. Cuando alguien te lastima muy fuerte hay que tomar distancia», sentenció.
