El presidente Javier Milei respondió con dureza al periodista Iván Shargrodsky, a quien acusó de manipular y descontextualizar fragmentos de su discurso en el Foro Económico Mundial de Davos. El mandatario utilizó sus redes sociales para rechazar lo que consideró un intento de tergiversación y calificó al periodista como «un zurdo clásico de manual».
La polémica surgió cuando Shargrodsky compartió un video editado en su programa, en el que distorsionaba el mensaje del presidente respecto a la ideología de género. El hecho ocurrió durante una entrevista al diputado nacional por La Libertad Avanza (LLA), Bertie Benegas Lynch, quien tuvo que analizarlo en un claro intento de Shargrodsky de que se contradiga a sí mismo. Milei, a través de su cuenta oficial en X, afirmó: «Deshonesto intelectualmente. Si así corrompe la verdad cayendo en la falacia del hombre de paja (se crea una mentira sobre algo/alguien y se lo ataca en base a esa construcción) el menos malo de ellos, imagínate lo que puede hacer el zurdo clásico de manual. Fin. Falacia = Derrota».
Las redes defienden a Milei
El episodio escaló rápidamente en redes sociales. Shargrodsky, conocido por sus posturas críticas hacia el oficialismo, muchas veces más políticas que reales, publicó el video señalando que el presidente había realizado declaraciones controversiales relacionadas con la ideología de género. En respuesta, seguidores de Milei, como Santiago Oría, difundieron la versión completa del discurso, asegurando que la edición realizada por el periodista no reflejaba las palabras reales del mandatario.
Según Oría, el presidente condenó el uso extremo de la ideología de género cuando se emplea como «escudo» para delitos graves como la pedofilia. «El presidente no se refirió a personas ni a su preferencia sexual, sino que condenó la ideología de género en su versión extrema», señaló en un hilo publicado en X.
Oría concluyó con un mensaje contundente: «El periodismo excremento busca mentir y ensuciar con falsedades porque no sabe de dónde agarrarse. Así banalizan la cuestión de fondo y terminan convirtiéndose en cómplices del mal muy real denunciado por el presidente. Van a seguir fracasando en su intento de frenar a Milei con mentiras».
Tensiones entre el Gobierno y la prensa
Este intercambio se enmarca en una relación tensa entre el presidente y ciertos sectores del periodismo, claramente alineados con ideologías de izquierda, a quienes Milei ha acusado repetidamente de actuar de forma sesgada y con intenciones políticas. En su discurso de Davos, Milei abordó temas vinculados a la economía, la cultura y los valores tradicionales, desatando críticas y apoyos por igual.
Con este último cruce, queda en evidencia la polarización que domina el escenario político y mediático argentino, donde cada declaración genera una intensa repercusión en ambos lados del espectro ideológico.
