Las ventas de materiales para la construcción cayeron 27,2% en el acumulado del 2024 y tuvo un descenso del 6,6% interanual en diciembre. La crisis en el sector de la construcción se profundizó en el último año con una caída sostenida en la venta de insumos y despachos de cemento, en un contexto marcado por la paralización de la obra pública y el aumento de costos en dólares.
Los datos surgen del Índice Construya (IC), que mide la evolución de los volúmenes vendidos al sector privado por empresas del rubro, como ladrillos, cementos, y otros materiales. «Durante 2024 se vio una reducción de las ventas con algunos meses de repunte. Creemos que el proceso de recuperación será lento y estará asociado a la reactivación de las obras privadas, traccionado principalmente por la expansión del crédito hipotecario y la búsqueda de inversión en ladrillos”, indicaron desde IC.
Por su parte, los despachos de cemento, un indicador clave de la actividad en el sector, registraron un derrumbe del 23,9% en todo el 2024, según datos de la Asociación de Fabricantes de Cemento Portland (AFCP). En diciembre, se despacharon 764.708 toneladas, lo que significó un 5,4% menos en comparación con diciembre de 2023 y una baja del 11,9% frente a noviembre, aunque este último dato estuvo influenciado por factores estacionales.
El desfinanciamiento del Estado nacional a la obra pública repercutió fuertemente en la actividad de la construcción en 2024
Matías Cattaruzzi, analista de Adcap, destacó en su cuenta de X: «Con sobre stock, alto precio de construcción y sin obra pública, se sigue en mínimos». La falta de obra pública fue uno de los factores más mencionados por analistas y empresarios del sector para explicar el desplome. El ajuste fiscal iniciado a fines de 2023 y la devaluación de ese mismo año agravaron la recesión en la construcción.
Entre agosto de 2023 y septiembre de 2024, el sector perdió más de 88.000 puestos de trabajo registrados, consolidándose como uno de los más golpeados por la crisis económica. El último dato del INDEC, correspondiente a octubre de 2024, reflejó una caída interanual del 24,5% en la actividad, una cifra que refleja la parálisis del sector en un contexto de alta incertidumbre económica.
Con estas cifras, el horizonte para 2025 parece incierto. Si bien algunos analistas señalan posibles mejoras vinculadas a la reactivación del crédito y la inversión privada, la recuperación parece lejana mientras persista la combinación de costos elevados, falta de financiamiento y ausencia de obra pública que aqueja al sector desde hace más de un año.
